(Capítulo 5)

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El ruido de la puerta me hizo girar en seco. Ahí estaba el, recostado en ésta mientras me miraba con sus brillantes e hipnotizadores ojos.
No otra vez, pensé.

-Harry vamos a llegar tarde a clases- el me ignoró y caminó pasando a mi lado.
-Vamos, ¿Prefieres estar encerrada con Snape durante tres horas o quedarte conmigo?- se paró frente a un sillón color escarlata, el asiento, respaldo y brazos están hechos de una tela la cual identifiqué como terciopelo, las patas en cambio están compuestas por lo que supongo era oro o algún otro material que simulaba serlo, en los brazos habían detalles hechos con éste mismo material.
-¿Cuál es la diferencia?
-Pues...yo soy más divertido- sonrío y se sentó en el sofá.
-Ambas opciones las encuentro desagradables.

Harry dejó escapar una carcajada para luego mirarme y lamer sus labios. Se puso de pie y caminó acercándose a mi.

-Me deseas _______.
-Sigue soñando Potter-volvió a sonreír y se acercó más a mi.
-Te propongo algo, vendrás y te sentaras conmigo, hablaremos de lo que tú quieras y si nuestra charla te resulta interesante, entonces te quedarás conmigo.
-Pero ¿Qué pasará si no me resulta relevante lo que tengas para decirme?- me crucé de brazos y lo miré a los ojos con una sonrisa en mi rostro.
-En ese caso, te dejaré ir y no te molestaré más.
-¿Qué ganas con todo ésto?
-Pasar tiempo contigo.

Y solo esas estúpidas palabras bastaron para sentir mi ritmo cardíaco aumentar.

-Felicidades Potter, lograste empalagarme en menos de un minuto, nuevo récord- el solo río, me tomó de la mano y caminó hacia aquel sofá dónde estuvo minutos atrás.
-Ven siéntate conmigo- me senté en una esquina del sillón y levanté mis piernas abrazandolas, el sofá era algo pequeño así que Harry tuvo que sentarse cerca de mí pero no lo suficiente como para ponerme nerviosa.
-¿Qué es éste lugar?- comencé a observar a mi alrededor, era un salón muy grande, con paredes de piedra y pisos de madera. El lugar estaba repleto de decoraciones en honor a Gryffindor, banderas, sillones de terciopelo rojo igual al sofá en el que estamos sentados, símbolos de nuestro león tallados arriba de lo que parecía un pequeño bar y en diferentes puntos de las paredes, luces de color rojo, mesas con manteles, servilletas, vasos y platos de colores rojos y dorados, pequeños leones de oro adornaban dichas mesas, en las paredes estaban colgados pósters gigantes con los jugadores del equipo de Quidditch, en estos estaban escritos sus nombres y el puesto que ocupaban, casi todo estaba decorado con los emblemáticos colores de Gryffindor, hasta las botellas de aquel bar eran escarlatas y doradas. También habían equipos de música y un estante gigante con los trofeos y medallas que Gryffindor ganó durante los partidos de Quidditch y la conocida copa de las casas.
-Lo descubrí en tercer año gracias al mapa del merodeador.
-¿Ya se encontraba así?
-No, nosotros lo hemos decorado, ahora es nuestra guarida, venimos aquí a festejar los triunfos de Gryffindor en el Quidditch.
-Entonces siguen haciendo esas fiestas, me pareció demasiado raro ya no escuchar ruido después de cada partido.
-De hecho estuvimos unos tres o cuatro victorias sin hacer fiestas debido a que McGonagall dijo que hacíamos mucho ruido, luego me acordé de éste lugar.
-¿Qué es eso?- apunté unas puertas de madera escondidas detrás de unas cortinas de seda...adivinen el color...si exacto, rojo.
-Oh amm bueno...es que hubo una vez que la sala estaba vacía ya que todos estábamos en Hogsmade, entonces Oliver aprovechó y trajo a una chica...y bueno ellos...amm- Harry estaba completamente rojo y muy nervioso.
-¿Cogieron?¿Follaron?¿Tuvieron sexo?¿Hicieron el delicioso?¿El frutifantastico?
-N-no hace falta que lo digas alto...además ¿Por qué conoces tantas formas de nombrar a...a...a eso?
-A ver Potter, primero que nada, tengo cultura en el ámbito erótico y segundo ¿Tanto te cuesta decir sexo? Se supone que tienes 19 años ya debería ser natural, pero bueno no importa, sígueme contando.
-Aun se me parece incómodo decirlo... después de que hicieron eso al parecer ella no le aviso que era su primera vez y el no nos avisó a nosotros que iban a hacer eso.
-¿Qué pasó?¿Quién fue el alma en desgracia que los encontró?
-¿Alma en qué?-Harry comenzó a reír frenéticamente- Ay Merlín eres tan ocurrente.
-Ajá sisi jajajaja fue muy gracioso ahora sigue.
-Okey...ay-suspiro profundamente- ya me calmé, bueno, como te decía, nosotros no sabíamos que ellos iban a hacer eso, pensamos que la sala estaba desocupada y entramos con la intención de jugar ajedrez y tomar algo...
-Espera ¿Quiénes entraron?
-Los gemelos, Ron y yo.
-Okey sigue.
-Cuando entramos estaba una chica que creo era de Hufflepuff acostada en uno de los sillones con Oliver sobre ella, no te voy a contar lo que pasó después porque fue extremadamente incómodo, sólo te voy a decir que tuvimos que pedirle ayuda a Hermione con un hechizo ya que en el sillón había quedado una mancha de sangre.
-¿Le "quita la virginidad" a una chica en un sillón y deja una marca de sangre en éste?¿Quien se cree?¿Ares Hidalgo?
-¿Quién es Ares Hidalgo? y ¿Por qué hiciste comillas con los dedos cuando dijiste "le quita la virginidad"?
-La virginidad no existe solo es un término misógino que un poco hombre inventó porque tenía la estúpida idea de que podía cambiar la vida de una mujer con su pene.
-Pero...¿Entonces por qué aquella chica sangró?
-Se le rompió el himen, es como un tejido muy fino que cierra el orificio superficial de la vagina, de hecho puede romperse incluso cuando haces ejercicio.
-¿Luego de las relaciones la...?-se aclaró la garganta- la vagina...¿No sé extiende?
-Te falta una clase de educación sexual...mira, la vagina siempre volverá a su tamaño original sin importar que ¿Por qué piensas que un pene la extenderá y quedará así siendo que durante el parto literalmente sale un ser humano por ella y de todas formas vuelve a su tamaño original? no seas ridículo Potter.
-Dios- suspiro mientras me miraba a los ojos y sentí que comenzaría a derretirme-eres tan inteligente.
-G-gracias.
-No me dijiste quien es Ares Hidalgo.
-Es el amor de mi vida.
-Pff.
-¿Qué pasa?
-No me pasa nada.
-Aja si y Harry Styles es mi novio, ya en serio dime que pasa.
-Ya te dije que no me pasa nada.
-Si te pasa algo.
-Que no.
-Que si.
-No.
-Si.
-No.
-Si.
-No.
-Si- comencé a gatear hacia el.
-No...¿Qué estás haciendo?
-Hare que me diga lo que te pasa.
-¿Cómo...?
-Así- me tiré sobre el comencé a hacerle cosquillas.
-_____ para.
-Dime lo que te pasa.
-Si no paras te vas a arrepentir.
-Te dije que no voy a parar hasta que me digas lo que te pasa.
-¿Ah sí? Bien- me tomó de las muñecas y giró en el sillón quedando sobre mí.
-Si me haces cosquillas diré la razón por la que estás así.
-Te escucho.
-¿Q-qué?
-Dime la razón por la que estoy así.
-Harry Potter estás celoso y de un personaje ficticio.
-¿Es un personaje ficticio?
-¿Entonces si estás celoso?
-¿No era que querías saber que era ese cuarto?
-Potter no me cambies el tema.

Harry me ignoró y se levantó del sofá encaminandoce hacia aquellas puertas.
-Potter.
-Ven.
-¿Qué?
-¿Quieres ver lo que es o no?
-Mmm si quiero.
-Entonces-Harry volvió a acercarse a mí y me extendió su mano-sígueme.
-Mmm okey...-tomé su mano y el me ayudó a ponerme de pie. Cuando estábamos frente a las puertas Harry corrió las cortinas de seda.















{Nota de la autora}

Perdón por no actualizar, no me funen por favor :(
En recompensa por no haber actualizado voy a hacer un maratón de 10 capitulos cortos :)

Mi hermosa sumisa (Harry Potter)(+18) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora