"Así es mi vida" (Nathan Sykes)

Capítulo 25:

Narra Alice: Okey, no sabía cómo reaccionar cuando sorpresivamente Jess me abrazo.

Jess: Alice te extrañaba (abrazándola aun)

Alice: Igual yo Jess (sonriendo)

Nathan llega sorpresivamente, agradeciendo que Jess me tapaba Nathan no pudo ver a quien abrazaba.

Nathan: ¿Jess a quien abrazas? (curioso)

Jess: Pues a Alice hermanito ( y se separaron)

Lo pude ver de cerca, muy cerca. Por estos dos años nos habíamos olvidado que existía el otro, ya me había olvidado de sus hermosos ojos cuando los veo de cerca. Se me había olvidado todo con respecto a él. Pero en realidad no, no me había olvidado de él como pensé.

Alice: (susurró) Nathan

Nathan: (Susurró) Alice

Nathan la miraba detenidamente, parece que él igual se le había olvidado cómo era.

Jess: ¿Qué les pasa chicos? (mirándolos extrañados)

Parece que Nathan no le conto nada a Jess

Nathan: yo, ella, nosotros (tartamudeando)

Alice: Ya no somos amigos desde hace dos años (mirando a Jess)

Jess: ¿Qué? No comprendo nada, ¿Cómo no me lo contaste Nathan?, ¿Cómo pudieron?. (Suspiro)

Alice: Jess yo (pero alguien interrumpió)

Nathan: No quiero hablar de esto (dándose vuelta y caminando hacia adentro de la sala de eventos)

Alice:  Yo me tengo que ir (tomándole la mano a Siva, pero la mano de Jess la detuvo)

Jess: Solo te diré esto una vez, por cualquier cosa que se hayan distanciado fue muy estúpido. Él verdaderamente te amaba desde que te conoció aunque nunca quiso decirlo.

Alice: Ya es muy tarde Jess, él solo se alejo (con una voz de tristeza)

Jess: (Suspiro) anda a divertirte amiga

Alice se fue con Siva a buscar una mesa en la que estaban sus amigos riendo de lo lindo y cuando ambos llegaron, se saludaron y ellos se unieron a la diversión.

En un momento de la noche Alice bailaba un lento con Siva y su mirada se encontró con la de Nathan, en su mirada se veía tristeza y molestia. Yo hubiera querido que mi pareja esta noche fuera Nathan, pero es mi amigo Siva quien me acompaña por la estupides que hiso Nathan el día de su cumpleaños, no se lo he dicho a nadie, pero me sentí muy mal cuando lo vi borracho. Me hacia recordar a mi papá cuando se emborrachaba y en mi interior me sentía con ganas de golpearlo y decir “¿eres estúpido o te haces? Esta estupides nos está alejando cada vez mas y tú te empeñas con seguir con este vicio. Un día cuando quieras estar cerca de mí y digas que cambies, ese día recuérdalo bien porque yo no te hare caso y te dejare”. Fue lo mismo que le dije a mi papá, pero le agrega “Seguirás siendo mi padre y te querré, pero ya no será nada  igual”. Veo a Nathan y me acuerdo lo que paso esa noche, ya no podía seguir mirándolo a la cara, me daño muy profundo por dentro; por esa razón separe mi mirada de la suya y me concentre en bailar y disfrutar los últimos momentos con mis amigos, pero algo me recorría sabia que él quería hablar conmigo, pero también sabía que no iba a ser nada como antes.

No sé quien, pero alguien me tomo del brazo y me alejo de Siva, él solo me sonrió y volvió a la mesa. “Oh no esa sonrisa no, ¿Qué tramas morenazo?” Mire a la persona que tomaba mi mano y me llevaba a fuera, en donde no había nadie.

Era él, era Nathan. Es gratificante y duro sentir su mano contra mi piel, no se me había olvidado su toque, pero si estaba encerrado en algún lugar. Sentirlo a él y a su piel tocarme fue tan, pero tan raro. Su toque era dulce, pero a la vez firme. No sabía si podría enfrentarlo, ni siquiera sabía si mis piernas responderían cuando me hable de cerca.

Holis peques, espero que les guste.

Nos vemos.