Jujutsu Kaise harem x TN/Tu Nombre/reader

Sukuna x TN

POV TN.

Aún recuerdo la primera vez que lo vi, fue a Sendai, Gojo y yo fuimos enviados a buscar el objeto maldito especial que había desaparecido, habíamos enviado a nuestro alumno Megumi Fushiguro a buscarlo, pero debido a la insistencia de los viejos tuvimos que ir en su apoyo. Para nuestra sorpresa Yuji Itadori, un humano aparentemente normal salvo su fuerza descomunal se habia comido el dedo de Sukuna para salvar a Megumi. Gojo se enfrentó a él para probar si Yuji era capaz de reprimir a la maldición. En cuanto Sukuna salió fue directamente hacia mí, con su enorme sonrisa sádica y esos ojos rojos que parecían reflejar el mismo infierno, su rudeza, su actitud, su maldita presencia me cautivaron.

Fue tan difícil cuando Yuji se hizo un estudiante más, no paraba de pensar en si Sukuna aparecería, anhelaba que tomara el cuerpo de mi alumno, quería ver a aquella maldición que no paraba de aparecer en mis sueños.

Gojo me pidio de favor ir al lugar en el que Yuji se encontraba para entrenar con el un rato. Eran las 8 de la noche, yo me encontraba entrenando combate cuerpo a cuerpo con Yuji, después de su supuesta muerte nos turnábamos Gojo y yo en su entrenamiento, ese día me encontraba sola con él, mientras peleábamos por una distracción de parte de Itadori lo termine tirando al suelo quedando yo sobre él.

TN: gane- dije sonriendo -ya te he dicho que no te distraigas, sé que estás ansioso por volver con los chicos, pero aún falta para el intercambio.

Itadori: lo sé  TN sensei, lo siento, seré más atento para la próxima vez.

TN: come algo, dúchate y después a dormir, que descanses—

Itadori: que descanse TN sensei

Fui a la que era la habitación provisional de Gojo en aquel lugar. Me duchaba cuando recordé como quedé sobre Yuji, cerré los ojos e imaginé que se trataba de Sukuna, que tomaba mis caderas y me jalaba hacia él, que rompía mi blusa y me tomaba con fuerza del cuello.

TN: dios ¿en qué estoy pensando?— agite mi cabeza para sacar esos pensamientos de mi mente.

Salí a mi habitación, tome una playera que era de Satoru y me la puse, me llegaba arriba de las rodillas, no había llevado nada de ropa ya que se suponía que Gojo era el que se quedaría con Itadori y no yo, pero de última hora fue llamado a una misión dejándome sola con el chico hasta la tarde del día siguiente.

Me acosté en la cama, cerré los ojos, me quedé dormida y casi de manera automática la imagen de Itadori con el torso desnudo me invadió, las marcas de Sukuna aparecían, me lo imaginaba a él en lugar de a Yuji, con su cuerpo bien definido goteando en sudor. Estábamos él y yo solos, él tomándome con sus fuertes manos, clavando sus garras en mis muslos, mientras yo pasaba mis manos por todos sus tatuajes. Me daba una enorme mordida en el cuello haciéndome despertar.

Me senté en la cama jadeando, llena de deseo, miré el reloj y eran las 2 de la mañana, una fuerte tormenta había comenzado, fui a la cocina por un vaso de agua. Un enorme estruendo me hizo soltar el vaso, cayendo en el suelo y rompiéndose en pedazos, iba a dar un paso, pero la luz se fue, por consecuencia pise un vidrio.

TN: ¡Mierda!

Un rayo ilumino el lugar, permitiéndome sortear los vidrios, perdí el equilibrio y estaba por caer cuando sentí unos brazos sosteniéndome. Era la silueta de Itadori.

TN: Yuji ten cuidado, rompí un vaso de vidrio, no vayas a lastimarte tú también.

No dijo palabras, me cargo y me sentó sobre la barra de la cocina, tomo mi pie y sin previo aviso saco el vidrio.

TN: ¡demonios! Una advertencia de que lo harías me hubiera gustado- bufo –lo siento, gracias por ayudarme.

Me disponía a bajar para ir a tratarme la herida, pero las manos de Itadori me detuvieron de las caderas, comenzando a bajar hacia mis muslos.