Solo mía

Sintió los besos y mordiscos en su hombro como era posible que con tan poco, su cuerpo pidiera más de él.

- no finjas, se que estas despierta. - la hizo girar.

- No

- no que?? No finges?

- no sigas...

- no mientas Candy, quieres que te haga el amor.

Tomo sus labios con deseo con enojo como si la quisiera castigar.

El cuerpo de la pecosa reaccionaba al mas mínimo toque, no le importaba con la rudeza con la que la tratara.

Dejo sus labios para besar su mentó, su cuello donde dio varias succiónes dejando marcas rojizas, queria que toda ella quedara marcada por él, siguió su camino hacia los pechos blancos donde ya habia marcas, los beso, los succiono, tenían un sabor único que lo enloquecía, le dio atención a los dos senos mientras tenía uno en la boca el otro lo acariciaba viajo su mano y la intimidad de la pecosa y pudo ver que estaba húmeda muy húmeda lista para el. Sin ningúna concideracion abrió sus piernas con su rodilla, la tomó entrando de una sola embestida, hasta llegar a lo más profundo que pudo.

La rubia solto un grito, todavía le era un poco doloroso al inicio pero placentero.

-dime que me detenga - le dijo con una sonrisa de lado.

- detente - se enojo la rubia por su cara de triunfo.

Siguió moviéndose, dándole estocadas profundas, - quieres que te detenga?

- mmmm.... Ahhhh...

- contesta!!

- no... Terry... sigue... Ahh!!!

El castaño obedeció a la petición de Candy y a su propio deseo, la embestia cada vez más rápido, hasta que paro de golpe y elevo las piernas de la joven y las puso sobre sus hombros, Candy pudo sentirlo mucho más adentro.

- aaahh!!

-te lastime?

- no,.. sigue ahh

Terry pensó que era perfecta, sus cuerpos encajaban tan bien, estaba hechos para estar juntos, era tan apasionada, lo ponía hasta el límite.

Los gritos cada vez eran más fuertes, Terry agradeció que la cabaña en la que se encontraban estaba a las afueras de Chicago.

Los dos alcanzaron el climax al mismo tiempo, se acostó al lado de ella, la jalo para que se recargará en su pecho, no puso objeción la pecosa. La respiración agitada se fue normalizando.

-Viajaremos mañana a Canadá

- no Terry, no puedo irme

- solo te estoy avisando

- no ire a ningúna parte.

- después de todo piensas que te dejaré aqui? Que dejaré que te cases con Niel?

- Niel?

- no me digas que lo quieres por que se que no, solo me amas a mi.

- que me case? No entiendo!!

- crees que no vi la nota en el periódico que te casas y de lo muy enamorados que están... 😡

- creo que no sabes leer... Yo no soy la prometida de Niel idiota.

El clavo sus penetrantes ojos azules en los de ella.

- yo vi la nota hace años y decía tu nombre y tu foto.