Destinados

Un Alfa preocupado pero feliz

Eran exactamente las 7:30 de la noche cuando llegaron al departamento, el azabache cargando en brazos a su pequeño quien aun no despertaba cosa que realmente comenzo a preocuparle pues ya habian pasado mas de 6 horas desde que se desmayo sin dar señal alguna de despertar por lo que lo llevo directamente a la cama y salio inmediatamente del cuarto por un recipiente con agua tibia, unos trapos y por supuesto un botiquin para volver a limpiar las heridas, una vez cerciorado de llevar todo lo necesario regreso a la habitación dejando unas cosas en una de las mesas de noche y otras en la cama, antes de empezar se dirigio al closet del peliverde sacando una pijama consistiendo en un camison largo y un short ambos de color blanco con franjas negras 

Acomodo al menor colocando una montaña de almohadas detras para poder elevarlo un poco, quito las vendas llenas de sangre para comenzar a remojar el trapo de algodon negro y pasarlo por sus brazos quitando toda suciedad de tierra y liquido rojizo teniendo cuidado con su hombro derecho prosiguiendo con su rostro pasando el paño de forma delicada debido a ciertos rasguños y moretones que tenia evitando lastimarlo

Prosiguio a quitar la ropa del menor hasta dejarlo en ropa interior y volviendo a pasar el paño por su cuerpo percatandose de algunos hematomas debido a la pelea con el cenizo sin querer presiono la herida de la pierna provocando un gesto de dolor en el menor quien comenzo a despertar con dificultad hasta poder reponerse un poco 

- ¿Porque me duele todo? Tengo frío ¿Donde estoy? - preguntaba mientras trataba de visualizar algo y sosteniendo su cabeza con una mano sintiendose mareado 

- Midoriya estamos en casa y el dolor es debido al enfrentamiento que tuviste con Bakugou - le contaba el mayor sentandose a un lado sosteniendo al pecoso por la espalda siendo un sosporte - ¿Como te sientes? dejame terminar de limpiarte para ponerte la pijamada - pedia volviendo a remojar el trapo, exprimirlo y pasandolo por las piernas del menor evitando lesionar mas su pierna 

- Me siento un poco mareado pero bastante adolorido ¿Qué fue lo que paso? - preguntaba dejando su cabeza en el hombro del mayor 

- En el entrenamiento de hoy peleaste contra bakugou de forma intensa, debo felicitarte por ganar su encuentro pero no pudiste esquivas la mayoria de los golpes cosa que debías hacer pues esa era la finalidad de la clase - mencionaba colocando el camision y cerrando boton por boton para recostarlo en la cama e introducir sus piernas por los orificios del short elevando sus caderas y terminar de ponerlo

- Espera... ¿Qué fue lo que dijiste? - levantandose lentamente viendo directamente a los ojos al azabache quien tenia una expresion de estrañes 

- Que le ganaste a bakugou - ante lo mencionado al pecoso le brillaron sus ojos de emoción dejando ver una gran sonrisa dejandose caer hacia atras tomando una almohada y dando pequeños gritos de emoción 

- ¡¡¡NO LO PUEDO CREER!!! - grito tan feliz - Es la primera vez que le gano - jalando al azabache quien cayo encima y fue abrazado  - Pero no debo cantar victoria aun, tengo que mejorar muchas cosas - el mayor se enderezo un poco esperando que no se haya lastimado el hombro su pequeño 

- Si pero eso te costo una herida en el hombro y en tu pierna derecha - señalando las zonas vendadas - y desgraciadamente deben sanar esas heridas bien para que puedas volver a entrenar - al menor se le borro su sonrisa pero sabia que era cierto y solo asintio 

- Es la hora de cenar así que preparare algo ligero o lo que haya en la lacena, queria que fueramos a comprar despues de clases pero... ocurrio esto... - el mayor guardo silencio cosa que no paso desapercibido de su compañero 

- ¿Qué sucede Shouta? - acuñando su rostro en sus manos y levantandolo para verlo directamente - Te ves triste y preocupado dime ¿Qué es lo que te pasa? - el pelinegro sostuvo ambas manos con las suyas