Ophis y madara comenzaron aumentar sus auras chocando la una con la otra, viéndose fijamente listos para pelear.
Madara hizo el primer movimiento acercándose a ophis dándole un puñetazo en el rostro el cual no alcanzo a esquivar enviándole a estrellarse contra el suelo creando un enorme cráter.
Ophis se puso de pie fue a golpear a madara pero este nisiquiera se movió ya que el golpe de ophis se quedó cerca de el.
Ophis: que pasa no puedo golpearlo.
Madara: parece que no ha notado el limbo.
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Madara sonrió y le acesto una patada en el estómago seguido de eso realizó una posición de manos diciendo jutsu de fuego fénix de fuego escupiendo una enorme cantidad de fuego la cual tomo forma de un enorme fénix el cual fue directamente a ophis pero no le afecto en absoluto.
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Ophis: ataques de ese calibre jamás lograrán dañarme.
Madara: el objetivo del ataque no era lastimarte más bien distraerte.
Kuroka: ophis detrás de ti.
Ophis volteo atrás de ella viendo una bijudama acercándose y a kurama a lo lejos.
La bijudama dió de llenó y provocó una enorme explosión.
Ophis salió de la explosión con algunos raspones y con una expresión de enojo.
Madara: que pasa, porque esa cara.
Ophis: estás más que muerto.
Madara: muchos me han dicho eso pero nadie lo a conseguido y déjame decirte que tú no serás la primera, solo eres uno más a una larga lista de imbéciles.
Ophis crugio los dientes y fue atacar a madara lanzandole una cantidad absurda de ataques mágicos.
Madara: eres fuerte, muy fuerte pero lamento decirte que tengo esta pelea ganada por el simple hecho de que careces de experiencia en combate, al nunca antes haberte enfrentado a alguien que te presentará un desafío real, tu y el resto de dioses se confían demaciado ya que jamás se les pasó por la cabeza la idea de entrenar.
