Una y otra vez me veo obligado a encontrarme contigo, me aflige el alma, me rompe la vida, pero te llevo a todas partes, solo aveces tiendo a perderme un poco, y te encuentro en el cigarro, en la música.
Vas y vienes, como las migraciones de aves, y siempre que llegas traes un aire nuevo de otra parte, vas y vienes, y siempre terminas acá, conmigo, encerrados en el espejo.