Confesión.

1K 126 13
                                    

( 4/? )

Namjoon estaba nervioso, se había tardado un mes en pensar bien las cosas y finalmente se había decidido. Se daría otra oportunidad, le confesaría a Jimin que le gustaba. Y era por eso que no había podido entrar a su Little Space a pesar de que ya casi llegaba Jimin, pero tal vez era bueno; debía decirle aquello como niño grande. Suspiró. La puerta se abrió repentinamente, decidió quedarse sentado en el escritorio coloreando lo que tenía a mano. Colorear lo calmaba. Jimin se le quedó viendo de pie, después de mes y medio juntos había llegado a conocer cuando trataba con Monnie y cuando con Namjoon.

– ¿Estás bien, Namjoon? – preguntó sonriendo.

Asintió con la cabeza sin voltearlo a ver. Jimin se agachó para quedar a la altura de aquel chico.

– Vamos, dime qué tienes. – insistió.

Namjoon se mordió el labio, ya se estaba arrepintiendo de haber tomado esa decisión. NO. NO HABÍA MOMENTO PARA DUDAS.

– Jimin... Es que... Quiero decirte algo. – comenzó a decir finalmente viéndolo a los ojos.

– Está bien, dime. – dijo aún sonriendo.

Namjoon se sonrojó excesivamente y escondió su rostro entre sus brazos recargandose en el escritorio.

– Así no puedo... Cierra los ojos... – le pidió sin levantar el rostro. Jimin se rió un poco pero asintió.

– Está bien, me voy a poner de pie y cierro los ojos. – dijo mientras hacía aquellas acciones. – Listo. –

Namjoon levantó la cabeza lentamente y lo volteó a ver. Ahí estaba Jimin parado y con los ojos cerrados, tenía que decirlo... Pero y si mejor... Su mente le dijo que se arriesgara y mejor demostrara aquello con acciones. Se paró también y se acercó lentamente, puso sus manitas en ambas mejillas de Jimin, se puso de puntitas y finalmente le dio un tierno beso en los labios. Jimin se quedó completamente inmóvil cuando eso pasó, no supo qué decir o hacer. Namjoon se hizo para atrás después de eso, volteó a ver el piso sonrojado y muy apenado.

– Perdón... – dijo instintivamente pensando que había hecho mal. Jimin se apresuró a negar con la cabeza y las manos.

– No tienes nada porqué disculparte... Yo eh.. no supe qué hacer... Yo... Ah... – balbuceó sin saber con certeza qué decir.

Namjoon se rió, era raro ver a aquel chico de esa forma. Normalmente Jimin vera quien sabía qué decir siempre y muy confiado, verlo bajar la guardia era gracioso.

– Oye... No te burles. – dijo sintiéndose un poco ofendido e hizo un puchero.

Namjoon volvió a reír un poco, puso sus dedos índice y pulgar juntos y apretó los labios de Jimin con ellos.

– Cuack. – dijo tal y como el pelinegro le había dicho hacía un mes.

Jimin también rió esta vez y lo abrazó para hacerle cosquillas después.

– No uses mis chistes contra mí. – dijo mientras hacía reír a Namjoon.

– No, Minmin... Espera... – decía Namjoon entre risas tratando de pararlo sin éxito alguno.

– No, no hasta que te disculpes. – decía de broma. Namjoon soltaba carcajadas y pequeños gritos.

– Está bien... Perdón perdón. – dijo aún riendo y Jimin paró.

Habían terminado ambos en el suelo, Namjoon sobre el regazo de Jimin. Sonrieron. Está vez fue Jimin quien acarició la mejilla de Namjoon mientras lo veía tiernamente.

– También me gustas, Monnie. – admitió tocando la punta de su nariz con el dedo índice. Namjoon sonrió grandemente. – Pero necesito saber qué quieres, hasta qué punto puedo llegar sin hacerte sentir incómodo. – continuó Jimin.

Escuchar aquello casi hacía llorar de felicidad a Namjoon, porque comprendió. No es que no hubiera querido regresarle el beso, no había sabido cómo. Se había preocupado por él...

– Me gusta dar besitos, pero sin segundas intenciones tanto en Little como fuera de éste. – comenzó a explicar Namjoon.

– De acuerdo, bebé. – dijo Jimin.

– Si alguna vez te enojas, no grites... Me da miedo. – siguió Namjoon.

– No gritaré, hablaré contigo ¿de acuerdo? Pero trata de tú tampoco gritar. – aceptó Jimin. Namjoon asintió con la cabeza.

– Tampoco dañes mis cosas si te enojas... – añadió Namjoon.

– No, bebé. No lo haré. –

– Tampoco quiero hacer nada de esas cosas... – dijo Namjoon.

– ¿Qué cosas, mi amor? – preguntó Jimin.

– Esas que no se deben hacer... Ya sabes, lo que empieza con "S". – dijo Namjoon en casi un susurro.

Jimin se rió un poco, la forma de Monnie de censurar la palabra "sexo" había sido demasiado tierna.

– No haré nada que tú no quieras, amor. Ni te voy a presionar. Vamos a ir despacito, a tu ritmo en todo momento. – prometió sonriendo.

Con forme decía cada una de las cosas que no quería, Namjoon había cambiado poco a poco su forma de ser y ahora que, al parecer, había terminado de decir al menos lo importante se había llevado la mano a la boca. Su transformación siempre era adorable.

– ¿Me das un besito, bebé? – le pidió Jimin.

Monnie asintió con la cabeza, se sacó la mano de la boca y le dio un beso torpe en los labios.

– Ay, que rico besito. – dijo Jimin después. Namjoon rió y dijo un par de balbuceos de emoción.

– Te quiero, Minmin. – dijo después abrazándolo. Le correspondió el abrazo sonriendo.

– Yo a ti, Minnie. –

Y así habían comenzado a salir oficialmente.

Cuidando al pequeño Monnie. •Minjoon• [ADAPTACIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora