Con un linaje envidiable, un poder fuera de lo común y un enorme conocimiento, Asmodeus Alice estaba seguro de ser el número uno de la escuela, después de todo el había sido elegido para hablar en la ceremonia de apertura escolar.
Con seguridad y determinación había llegado al auditorio, se preparaba para subir al podio, sabía lo que tenía que decir, estaba más que listo para animar y de paso lucirse una vez más, sin embargo la satisfacción le duró solamente un instante, pues, su nombre había sido reemplazado por alguien más. Asmodeus no podía creer lo que veía, un pequeño demonio de cabello azul, que se veía como si fuera a desmayarse en cualquier momento estaba usurpado el que sería su momento, y para su sorpresa el pequeño usurpador recitaba un hechizo complicado, todos estaban aterrados, pero Asmodeus estaba anonadado, su sentido de competencia urgía por ir a buscarlo y demostrarle quien sería el máximo demonio en la escuela.
Pronto se dió la esperada oportunidad, ahí en medio del patio escolar lo reto a un duelo, definitivamente sería un despliegue de poder pues Asmodeus no dudo en atacar con sus llamas al desafortunado usurpador, sin embargo al igual que en la ceremonia pronto fue superado por su adversario, pues por más que el fuego crepitaba, simplemente no lograba alcanzarlo, el peliazul estaba sacándolo de quicio, corrio hacia el frente, pero lo siguiente que supo fue que había sido derrotado.
Cuando despertó, supo que había perdido, pero lejos de enojarse, se sintió motivado, y por primera vez, sintió el calor recorrer su cuerpo, el éxtasis de algo nuevo, y de conocer la derrota lo llevo a ir por su adversario, y así ese día, le juro lealtad al ser más especial que había encontrado, desde ese momento supo que su existencia sería para complacerlo a él, que su fuego sería para protegerlo y ayudarlo a llegar a sus metas, esas llamas de las cuales Asmodeus Alice estaba orgulloso, pasarían a ser su más grande arma para proteger lo que el había comenzado a amar.
No sabía que en ese momento, estaba entregando su destino a algo más grande, algo que el ni siquiera imaginaba.
El fuego que corría por sus venas, se encendió una vez más motivado por Iruma, quien de ahora en adelante sería Iruma-Sama.
Fin ( ˘ ³˘)♥
