Todo lo que no saqué se ha quedado atrapado entre las costillas; ya no hay sierra que corte ni hilo que pueda tirar de él. Y sigue presionando y no me deja respirar.
Sigue, sigue, sigue.
𝐈.
Todo lo que no saqué se ha quedado atrapado entre las costillas; ya no hay sierra que corte ni hilo que pueda tirar de él. Y sigue presionando y no me deja respirar.
Sigue, sigue, sigue.