Pretty Savage

Día 3- No Today

Tema: Protector.

La alarma sonó, despertando a un pelinegro que estiraba su mano para intentar callar la alarma antes que despertara a su pareja.

El celular marcaba las 5:30 de la mañana, y aunque el pelinegro tenía más ganas de quedarse en cama prefirió levantarse, vio cómo su pareja aún se encontraba dormido en su esquina, abrazando algún peluche que tenia forma de onigiri, solo le dio un beso en la cabeza y se dispuso a salir.

Cuando llego de correr vio como todo estaba igual a cuando se había ido, al parecer su pareja otra vez no se iba a parar temprano, prefirió meterse a bañar para empezar con la rutina del día.

Después de terminar su ducha, empezó haciendo el café, para después buscar la papelería que debía llevar al trabajo, mientras terminaba de vestirse con el traje, se puso un mandil y se dispuso hacer el almuerzo para él y para Toge. Cuando termino todo, busco los medicamentos de Toge, puso el desayuno en una bandeja y fue a la recamara.

-Toge, cariño- dijo mientras ingresaba a la habitación, puso la bandeja en la mesa de noche y se acercó a despertar a su pareja- Cariño, es hora de despertar- el albino se removía entre sueños intentando despertar. Cuando morado y azul se cruzaron, era cuando había empezado un nuevo día.

Toge comía tranquilo el desayuno, era ligero unas crepas con plátano y miel, tenía un jugo de durazno acompañándolo ya que tenía prohibido tomar café. Yuta veía desayunar a su pareja, él había terminado hace tiempo y solo disfrutaba de su café cuando empezó hablar- Toge, hoy tienes cita con la doctora. - el albino volteo a verlo y aunque su cara demostraba todo el disgusto, no pudo quejarse- Maki te llevara, yo tengo trabajo que terminar.

Odiaba ese sentimiento de no poder estar con su pareja en todo momento, pero tenía que entregar esa papelería y asistir a varias juntas del consejo, el pelinegro le dio el medicamento al ojimorado para que las consumiera- No quiero berrinches hoy, Toge- era difícil hacer que el mencionado tomara el medicamento muchas veces las consumía para después tirarlas y otras veces simplemente se negaba.

Por milagro hoy, las había consumido, verifico que las tomara completamente y no hubiera indicio que las fuera vomitar- Buen chico, traeré onigiris para cenar- después de decir eso Yuta tomo la bandeja con las cosas para dejarlas en el lavabo y poder marcharse.

-Maki vendrá por ti, a las 11, por favor toma una ducha o ponte algo diferente, ¿sí? - el pelinegro le dio un beso en la frente a su pareja- Intentare llegar temprano, cualquier cosa, Toge, cualquier cosa, mándame un mensaje- volvió a salir de la habitación para después salir de casa, dejando a su pareja entre sabanas y aun con su pijama.

Eran cerca de las 4 de la tarde, el pelinegro no había recibido ni un mensaje de su pareja para reclamar algo o de su amiga para saber cómo iba su cita con la doctora.

-Heeey Yuta Kuun, como esta mi sobrino? - la voz venia de la entrada de su despacho, era su tío de cabellos blancos.

-Tío Satoru, todo bien, que lo trae por aquí- el pelinegro dejo su celular en el cajón para ponerle atención al dueño de la empresa, su tío Satoru Gojo, aunque creía que había cambiado su apellido.

-Vamos, Yuta, se te nota en la cara, ¿dime que paso? - el albino cerró la puerta para después sentarse en el sofá que había.

-No, es solo Toge me preocupa-

-Todavía sigue

-Ninguna palabra, lleva dos años sin decir ninguna palabra.

-Yuta, entiende que para Toge fue difícil- el albino estaba preocupado por ambos, y aunque creía que no era lo mejor que decir, esperaba poder hacer que su sobrino se desahogara.