Supernatural Temporada #16 [Completa]

#15 Yin y yang

– Cuando llegaron al búnker, Javier sintió una fuerza muy conocida. Él entró al búnker buscando por todos lados. Los hermanos se dieron cuenta y le preguntaron si estaba todo bien. Pero Javier contestó que había alguien dentro del búnker que conocía desde el principió de la vida. Los que iban con él, se sorprendieron al escuchar lo que dijo, que Castiel lo siguió para saber que era lo que pasaba con Javier. Castiel lo siguió hasta el cuarto de Lizy, donde se encontraba Paul. Javier se detuvo delante de Paul y le dijo que dentro de él había un ser de oscuridad. Paul se asustó por la forma tan fría que lo hizo Javier. Que le contestó que no sabía nada de lo que le había dicho. Castiel le tocó el hombro a Javier y le dijo que Paul portaba a Amara, la hermana de Chuck.

Al instante llegaron los hermanos al cuarto. Sam le dijo a Javier que trataron de liberarla pero no podían. Javier miró a Paul de una manera furiosa, y miró a Sam y le preguntó ¿Quién la había encerrado? Paul miró a Javier con miedo y le dijo que fue un tal Jack. Javier miró a su alrededor, respiró hondo y con dos de sus dedos le tocó la frente a Paul. Y de momento Javier desapareció y Paul se calló desmayado al suelo. Castiel lo trató de devolverle el conocimiento pero no podía.

EN LA PRISIÓN DE AMARA

– Javier entró a la prisión donde se encontraba Amara sentada en una silla amarrada. Javier siguió caminando por esa oscuridad, hasta llegar a la única luz que estaba en todo ese inmenso lugar. En esa luz estaba Amara con la cabeza hacia abajo. Él se paró delante de ella, y solo le dijo que si lo reconocía. Amara subió la cabeza y le dijo que no sabía quien era, pero le preguntó como había llegado hasta aquí. Javier la miró fijamente y le dijo que debería recordar para que supiera quien es él que entró a su prisión. Amara dijo que no sabía quien era y que no lo recordaba de ninguna parte, aunque tenías la misma fuerza que el que trajo devuelta a los winchester a la vida. Javier sonrió y le dijo que iba a recordar cueste lo que cueste. Él puso sus manos rápidamente en la cabeza de Amara y ella se le pusieron los ojos blancos...