Me Y Girl

7: Agobiante.

     —. Mamá, puedo hablarte de algo.

    Trato de decirlo bajito para no despertar a mi padre que dormía en la sala. Ella apenas tenía unos minutos al día porque debía trabajar. Su rostro cansado me entristecía y así que trataba de ayudarla en los quehaceres de la casa. Hasta donde podía ya que tenía que dividirlo con la escuela.

    —. Sí, claro paulie.

    Nervioso sostuve la hoja del permiso y le pedí que fuera arriba en mi habitación.

  Temiendo que mi padre pudiera escucharnos.

   —. Mamá se que no te lo había dicho por cuestiones de tiempo y por qué no sabía cómo lo tomarias.

   —. No me espantes Paul .— dijo. — ¿Acaso tu padre te hizo algo, te toco indebidamente?

  Negué deprisa.

    —. El no me hizo nada. Es otra cosa, es sobre al club al cual me uní en el colegio. De verdad mamá intenté unirme al club del futbol americano pero no me aceptaron y me uní al club de porristas.

  Esperé, y esperé por un grito o reclamo pero mi madre no dijo nada.

   —. Paulie no me molesta. Eso no te hace más o menos hombre y quisiera que tú padre te aceptará tal como eres pero será mejor que jamás se entere o no sé que te haría.

   —. Gracias. De verdad, gracias. Pero también necesito la autorización de mi papá y no sé cómo obtenerla.

   —. No te preocupes yo la conseguiré pero debes júrame que nunca pero nunca le dirás esto.

   Yo asenti.

   —. ¡Te lo juro!