CAPITULO ¹

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Aquí me encontraba un lunes por la tarde comprando junto a mi madre cosas escolares.

Dentro de una semana exacta comenzaría el año escolar. Para ser sincera no me causa emoción alguna tener que volver a ese lugar.

Estoy en el penúltimo año, saber que me quedan aproximadamente dos años, me hace preguntar si es necesario estudiar.

Espero fastidiada a que mi mamá termine de hablar con aquella persona que no veía hace años.

Salir con mi madre es ser detenida a cada cinco minutos por personas que sabrán en su casa quienes son.

Nunca en la vida los he visto y siempre son personas diferentes, para hablar de como van sus vidas o simplemente saludar.

Esas son las consecuencias de tener una mamá muy sociable.

Odio cuando soy obligada a algo; no podía forzar una conversación para esas personas por lo que difícilmente respondía con monosilabos, es muy tedioso estar soportando eso todo el día.

Hay algo que llamo modo automático, es cuando me meto en mis pensamientos ignorando lo que sucede a mi alrededor.

Algunas veces suelen descubrirme cómo en este momento.

La mujer frente a mi se adelantó y detuvo bruscamente, ocasionando que nos demos un cabezazo asi saliendo de mi trance.

- mamá! Eso dolió!! - sobe mi frente con los ojos aguados por el doloroso golpe que me di, la punzada del lugar me avisaba que un chichón probablemente crecería

- Pues eso no hubiera ocurrido si prestarás atención a lo que te digo, no creas que solo te dolió a ti, de que tienes hecha la cabeza? Hierro? - dijo mi mamá mientras sobaba su frente al igual que yo, en intento de ser tierna hizo un puchero que a mí parecer fue más una mueca

- claro que prestaba atención- me defendí, evitando un reclamo por parte de mi progenitora

- si según tú me escuchabas que fue lo que te prengunte?- inquirió arqueando una ceja y su mano derecha en la cadera esperando mi respuesta

- Amm.... Pues.... Me preguntaste sobre...- me quedé en blanco ya que tenía razón, no tuve de otra más que esperar ese pellizco que no tardó mucho en llegar- AUUUU podrías ser menos brusca con el ser que dices llamar hija?

Rodó los ojos para luego sonreír, mi madre y yo llevamos una buena relación. nos tenemos mucha confianza para andar de broma en broma, contarle mis cosas y ella a mi las suyas.

Cualquiera que llega a conocerla, comienza a amarla en cuestión de segundos.

- retomando lo que decía y mantenerte informada; Daniel invitará hoy a Jihyo a casa para la cena, deberías de invitar también a Tae - volvió a caminar, saliendo del centro comercial en el que nos encontrábamos

- oh, está bien. En un rato le aviso

Llegamos a casa luego de unos minutos en carro, ayudé a acomodar lo que compramos para la alacena en su lugar.

Terminé dirigiendome a mi habitación con el nuevo uniforme, el de los años pasados ya no me quedaba.

Culpo al helado de oreo y todo lo derivado de esa galleta.

Abrí mi clóset sacando lo viejo e incorporando lo nuevo.

Bajé hacia la sala en busca de mi cartera, una vez la encontré tomé mi teléfono marcando el número de Taehyung.

tanto me extrañas?- habló a través del teléfono el último mencionado

ya quisieras - respondí para acto seguido escuchar la risa de mi mejor amigo

Porque eres tú | Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora