-CAPÍTULO 1-

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Nadie espera que su futuro sea prescrito, vivimos con completa tranquilidad, siempre distraídos…
sin observar nuestro alrededor, sin analizar nuestro entorno… a las
personas… simplemente ponemos a juego nuestra vida cada día sin darnos cuenta…

Eso me ocurrió a mi .

El sudor recorría mi frente , pequeñas gotas con sabor salado se deslizaban por mis labios, mientras sentía la tenue brisa que soplaba...

Mire hacia abajo un segundo y note que los cordones de mis zapatos estaban desatados, fui bajando la velocidad de mis pasos hasta detenerme por completo. Tomé una bocanada de aire, dejando que mis pulmones inhalaran el suficiente oxígeno para después soltarlo con un leve suspiro. Me incline un poco para poder abrochar mi agujeta…

Solo un segundo bastó para cambiar por completo mi vida.

Estaba por terminar de atarlas, cuando siento unos brazos rodearme por detrás, sentí como con su fuerza me levanto haciendo que quedara sobre mis pies. Asustada y con
miedo, intente resistirme, escapar… pero el era mas fuerte que yo…
Colocó bruscamente un pañuelo sobre mi nariz y boca.

No pude reaccionar, no pude ver absolutamente nada, en cuestión de segundos la luz se fue desvaneciendo, nublando por completo mi vista y conocimiento.

...

Abrí mis ojos lentamente intentando acostumbrarme al resplandor de la luz que se encontraba sobre mi cabeza, además de aquella luz no había una sola pizca de brillo en algún otro lugar, todo era obscuro, mis manos y pies se encontraban aprisionados por cuerdas, en mi boca yacía una mordaza que no me permitía hacer ningún movimiento.

No sabía donde me encontraba, no sabía una hora, si era de día, o ya había anochecido, mi mente era un manojo de nervios, pensaba en cómo podría salir, una ventana… alguna grieta por donde pudiera escapar, deverdad no sabía cómo aveces podia llegar a ser tan idiota, claramente si te secuestran, no te dejarían en una habitación con ventanas o grietas por donde pudieras salir, amenos que tu secuestrador sea un completo estúpido, no creo que el mio lo fuera realmente.

Escuche unos ligeros pasos y el sonido de unas llaves chocando entre ellas, supuse que alguien trataba de entrar por lo que comencé a removerme en mi propia silla.

El pánico se apoderó de todas mis extremidades e intentaba gritar pero era imposible gracias a la mordaza que apretaba con fuerza mi boca.

Una luz se asomó por la orilla de aquella tabla de madera, la silueta de un hombre no dudo en hacer su aparición.

Sentí como mi corazón bombeaba sangre a mil por hora, y cuando menos lo espere la puerta se cerró nuevamente.

Espere alguna señal de movimiento, no se escucho nada, supuse que este había salido, pero claro, eso no ocurrió.

-Aria Willson Stone… lindo nombre…- Sentí un ligero escalofrío al oír aquella voz…

-Esto será divertido... Vamos a  jugar un poco, bien?... preguntas, tu me haces a mi yo te respondo, estoy seguro de que sabes cómo funciona…-

El sonido ensordecedor de la silla siendo arrastrada por él, me dejó completamente helada, pero una vez más este comenzó a hablar - claro no te lo dejaré tan fácil; verás pequeña, llevo tiempo vigilandote,  tu padre no quiso escuchar mi advertencia… ah tan tonto -rio levemente- pero bueno en que íbamos... cierto, las preguntas... pregunta que hagas pregunta que te costará … esto no te lo pondré tan fácil…-escuche una risa de su parte algo desconcertante, de verdad sentía como cada pequeño bello de mis brazos se había tensado a causa de sus palabras .

Blood, Sweat and TearsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora