Después de mi compromiso con Pía las cosas iban mejor, eso le agrado tanto a mi padre que me dejó ir a su propiedad por cuatro días
Para los ojos de los demás yo saldría de viaje para arreglar unos asuntos pero la realidad era otra y aunque eran pocos días estaba dispuesto a pasarla bien ya que en cuanto estuviera casado con Pía esto no se repetiría nunca mas
Al llegar Esther me sonrió amablemente mientras Miltón se acercó y tomó mi maleta para llevarla a mi habitación
— Creímos que llegarías más temprano
Yo sonrió y me acerco a ella para tomar sus cálidas manos
— Intente salir lo más temprano que pude pero fue imposible... lo importante es que ya estoy aquí
Ella sujeto mi mejilla con dulzura y asintio
— Tienes razón muchacho, deverias pasar ya que solo faltas tu para comenzar a cenar
Asenti y le ofreci mi brazo para caminar juntos hacia el comedor de los empleados de mi padre, yo decidí ir en silencio ya que apesar de todo no era fácil para mi enfrentarme a mi pasado
— Lo entiende perfectamente Darius, no tienes de que preocuparte
Como siempre Esther supo lo que me preocupaba pero eso no era sorprendente ya que ella me vio nacer y era de las pocas personas que me conocía a la perfección
— Siempre quise que las cosas fueran diferentes para nosotros pero lamentablemente no...
Ella se detuvo antes de cruzar la puerta y sonrió levemente
— Desde que eras niño sabias lo que pasaría, tu padre es un desgraciado y no existe nada que lo haga cambiar, sabemos el motivo por el cual aceptaste casarte con esa chica y apesar de todo yo espero que logres ser feliz
Yo suspiro y cierro los ojos por un momento ignorando lo último que dijo ya que no se puede ser feliz cuando alguien más está en peligro constante por tu culpa
Al pasar todos me saludaron lo mejor posible ya que se que algunos están molestos por mi compromiso con Pía
Todos cenamos entre risas y anécdotas, recordando cuando todo era diferente momentos en los cuales yo era feliz, todo iba bien hasta que de pronto su mirada se cruza con la mia y decidí levantarme
— Acompáñame, tenemos que hablar
Asiente si pensarlo, su mano sostiene la mía y cuando salimos al jardín ambos nos sentamos en la gran fuente, me armo de valor para hablar de esto ya que es importante que le diga frente a frente lo que ocurrirá apesar de que ya sabe sobre mi compromiso con Pía, abro la boca para hablar pero me sorprendo cuando pregunta con tranquilidad
— ¿Cuando vas a casarte?
Evito mirar sus ojos y le respondo con firmeza
— Aun no lo se pero será pronto
El silencio se hace presente una vez más y de pronto susurra
— Voy a extrañarte...
Junto nuestras manos una vez más y suspiro con tristeza
— Y yo a ti...
Nadie dice nada más y solo miramos al cielo en total silencio
Sus caderas se movían con rapidez mientras gemia en mi oído derecho, sus labios me besaban con intensidad y sus manos jalaba mi cabello mientras se volvía loca encima de mi
— Ya extrañaba sentirte
No respondi, intentaba seguir el ritmo o sentirme completo como ella pero algo no me lo permitía y ese algo tenia nombre y apellido
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Pretend with me +18
Teen FictionElla una chica de dieciocho años sarcástica, loca y extrovertida El un chico de veintidos años, impetuoso, egoísta y sexy Ambos forzados a tener una relación y métidos en la misma jaula imaginaria por orden de sus familias de donde ambos quieren esc...