cartas a Chongyun

Enojo.

Hoy hice lo inevitable, estalle con todo el mundo, probablemente les dije cosas muy hirientes, no se lo merecen, no debería rematar con ellos mi dolor y el enojo que tengo contigo porque te fuiste, Chongyun.

¿Cómo podría soportar a un idiota que se atreviera a insultarte con su grupo de amigos?
No quería salir con él, ni con nadie, insistió semanas y todas le dije que no, ¿Era muy necesario faltarte al respeto?

"Te eh dicho que no quiero salir contigo, déjame en paz" - "Claro, aún no superas a tu novio el muertito. Mi pregunta, ¿Vas y haces cosas raras con su cuerpo?"

¿deseabas tranquilidad? eso no era una opción. Tal vez no era normal de mi acudir a la violencia, pero no pude evitar el golpearlo, no soportaría que dijera esas cosas de ti.

"Se llama necrofilia, y no, no lo hago ¿tu si? ¿Acaso debería disculparme por no querer salir con un idiota como tú? Es muy mi problema si no quiero superar a mi novio, a ti que te importa, imbécil"

Lo que me esperó después: una mala tarde llena de enojo, pero lo que más me enfada, fue que todos: Xiangling, Bennett, Aether, Childe y Hu Tao, fueran hasta nuestro departamento a regañarme. ¿Acaso son dementes? ¿Qué harían ellos en mi lugar? ¿Qué harías tú en mi lugar?
Y tal vez fue mi enojo hablando, pero dos que tres verdades les dije a cada uno. El único que no me dijo nada y me acompañó fue Xiao, él debe entenderme mucho más que todos o él único que me entiende. Dime, ¿Estás con Venti en este momento?

Pero sigo enojado contigo, no sabes cuan enfurecido estoy, me dejaste, me abandonaste, solo, sin nadie, ¿por qué? esa es mi pregunta diaria. Dejaste nuestro hogar, no era el más grande, pero era nuestro, cuando nos idependizamos apenas cumpliendo 18. No he podido sacar tus cosas, ni si quiera tus paletas de hielo. Las fotos de ambos siguen colgadas en las paredes, y un marco roto: motivo de mis impulsos.

Aún léo tus mensajes desde mi celular y algunas veces desde el tuyo, no me he desecho de tu celular, me mantengo lo más posible apegado a tus cosas para poder sentirte cerca, uso tus camisas y sudaderas para dormir abrazando la almohada o nuestro gato, porque no estás. La almohada es tu sustituto, tu único sustituto. Pero no es suficiente, me siento tan solo, estar rodeado de amigos, familia, de libros y tus cosas, no me quitan mi soledad, tú eras mi soporte emocional, quien me mantenía estable y acompañado, ¿ahora que me queda? lo único que amaba en mi vida eras tú, lo único que necesitaba en mi vida: tú, nuestra felicidad, nuestro futuro.

Llegar sólo a la casa, sin ti o sin que me recibas, aumenta mi soledad. La mayoría de esas veces suelo tirarme de rodillas al suelo y comienzo a llorar hasta que mis ojos no pueden más.

No tengo nada, no tengo a nadie, a nadie le interesó un carajo, ellos han superado tu muerte, pero yo no, y siguen diciéndome que siga adelante que así lo hubieras querido y lo sé, pero seguir adelante sin ti no es una opción, a este paso no sé si pueda seguir viviendo, tal vez sea mejor encontrarme contigo de una vez.