Ven sol,
Ven a mí
atraviesa las ventanas,
traspasa con tus rayos
los cristales de mi alma.
Ven,
Entibia mis temores,
con tus palmas doradas;
ven,
ven a mí
que sino vienes
iré a buscarte,
con fuerzas invisibles
Y alas prestadas:
volveré en la lluvia
A los grandes valles,
Y al atardecerLos dos juntos arroparados,
con suaves olejades.