One-Shot

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N / A: Notó la falta de nuevas historias de NaruTayu. Aquí está mi respuesta a ese problema. A propósito, nunca usé el punto de vista de Naruto o Tayuya.

Aproximadamente una semana, seis días para ser precisos , antes de que se suponía que Naruto y Jiraiya regresarían, Tsunade recibió una carta de un sapo. En él, encontró una explicación poco convincente de su idiota compañero de equipo, afirmando que él y su alumno tardarían un mes más de lo planeado. Por mucho que la molestara, estaba bien con eso. Sin embargo, la carta continuaba explicando que podía esperar que dos nuevos residentes de Konoha regresaran con ellos.

Tsunade dejó la carta y suspiró. No le sorprendió que Naruto hiciera nuevos amigos cuando se lo dejaba mayormente solo para correr desenfrenado por todas las Naciones Elementales, pero ¿tenía que arrastrarlos de regreso aquí? Si fuera otro Jinchuriki, Tsunade renunciaría. Al menos, estaba segura de que al menos sería un antiguo enemigo pacificado convertido en mejor amigo. Volvió a mirar la carta. ¡Y dos a la vez!

Por eso Tsunade decidió terminar el día temprano. Si Naruto estaba trayendo de vuelta a dos nuevos "amigos", ella necesitaba todo el sake que pudiera conseguir antes de que los dolores de cabeza comenzaran a aparecer en abundancia. Y cuando un mes se convirtió en dos, pasó de dos a cuatro y finalmente se extendió a seis meses completos, Tsunade se quedó sin sake.

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Fue un día tranquilo a las puertas de Konoha. Algunos pueden encontrar eso aburrido, pero tanto Izumo como Kotetsu lo prefieren así. Cada día era un buen día cuando nadie intentaba matarte. Izumo olfateó lo más arrogante posible a un comerciante que había "perdido" su licencia cuando Kotetsu le dio una palmada en el hombro.

"¿Qué?"

"¿Tú también estás viendo eso?" preguntó, señalando con la cabeza hacia la puerta.

Izumo estiró la cabeza, mirando a los comerciantes. Sus ojos se agrandaron. "Oi, ¿no es eso-?"

"Ha crecido," comentó Kotetsu.

"¿Y quién es ese con él? ¿Es Kazekage Gaara?" Izumo se preocupó. "¡Mierda! ¡¿Nos perdimos algo ?! ¡Tsunade nos va a asesinar!"

"Ese no es el Kazekage," frunció el ceño Kotetsu. "El cabello es demasiado largo. Y ese es más pequeño". Los miró con los ojos entrecerrados cuando dejaron la puerta atrás. "¿Es esa... una niña?"

De repente, un hombre alto salió de la multitud hacia ellos, antes completamente inadvertido. Ambos guardias de la puerta tuvieron que mirar hacia arriba casi un pie entero para encontrar la sonrisa fácil de nada menos que Jiraiya de los Sannin.

"Hola, estamos de vuelta".

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Sakura estaba a punto de perder el control y derrotar al hombre que estaba sentado en su mesa de examen cuando alguien abrió la puerta. Con una última mirada fulminante al idiota que tuvo la audacia de intentar cortejarla en el trabajo, Sakura se volvió hacia la enfermera- No , espera , ese era uno de los Genin aquí en una misión de Rango D. Se sintió sonreír. Pensar que esta niña era solo cuatro años menor que ella.

"¿En qué te puedo ayudar?" preguntó, ignorando la protesta del que pronto sería el saco de boxeo.

La niña se sonrojó. Dios, ¿Había sido así de pequeña alguna vez? "¡Hay una señora que está aquí para un chequeo! ¡E-Ella da mucho miedo!"

Sakura suspiró. Después de todo, esta era la parte shinobi del hospital y las kunoichi mayores eran simplemente aterradoras en el mejor de los casos. Solo mira a Anko . Esa mujer había traumatizado a más niños que enemigos, lo que supuestamente la hacía realmente mala en su trabajo en Tortura e Interrogatorio.

Como nadie masDonde viven las historias. Descúbrelo ahora