Parte 1

59 2 0
                                    

capitulo 1:

Hola amor, He empezado a escribir tantas veces esta carta que me duele. Normalmente dejo de escribir a mitad, bien porque mis lágrimas no me permiten seguir, o porque una llamada tuya me interrumpe, esta vez no voy interrumpir mis pensamientos y dejare que fluyan sobre este papel.

Antes de que arrugues esta carta, des un golpe, o me llames y no obtengas respuesta, piensa que es la explicación de porque me alejo de ti. Y de porque no quiero que me busques.

No voy a caer en esos clichés, no te voy a engañar, ni te voy a decir que es lo mejor para ti, ni para los dos., porque no es bueno para ninguno, pero si es necesario. Mi corazón se queda sin ganas de latir al mismo tiempo que este bolígrafo derrama su tinta en el papel.

Te quiero y nunca dejaré de hacerlo, pero también te odio, si me alejo el odio desaparecerá, tengo miedo de que desaparezca también el amor, pero prefiero no sentir nada, a no querer verte. Maldigo a Cupido por cruzarte en mi camino, Maldigo a mi corazón por quererte, o más bien por odiarte, los maldigo a ellos pero te condeno a ti, es injusto, si. Pero desde el momento que me he decidido a coger este folio solo pienso en mí.

Voy a ser clara, me enamore de la persona que eres y sigo enamorada, pero no soporto la persona en la que me has convertido. Te voy a intentar explicar la razón de mi huida

 La primera vez que te vi, supe que podrías hacer lo que quisieras conmigo. “amor a primera vista” lo llaman… Tu chulería, tu actitud, tus ojos, hasta la forma de caminar me atraía, después te acercaste a mí y escuche tu voz, y un escalofrío recorrió mi espalda. Dios, parecía que se habían cumplido los deseos que pedía al soplar cada tarta, al tirar una moneda a una fuente o al ver pasar una estrella fugaz a la vez para traerte hasta mí. Podría decir que todo lo que había a nuestro alrededor quedó en segundo plano.  Tú me has enseñado lo que es el amor, y te voy a estar eternamente agradecida, porque sinceramente has sido la locura con la que todas las adolescentes soñamos, siempre serás el protagonista de mi libro favorito. Pero cuantas historias de adolescentes duran para siempre….

Al mismo tiempo que nuestro amor crecía, yo cambiaba. Antes de conocerte sonreía todo el rato, nunca me cabreaba, casi no iba de fiesta, y nunca desobedecía a mis padres. Es verdad que lo de la fiesta fue un cambio bueno, pero no me gusta que mi sonrisa dependa tanto de ti y que cada dos días nos enfademos por tonterías, no me gusta que hayas provocado tantas lágrimas en tan poco tiempo.

Lo siento cariño, siento tanto tener que decirte adiós de esta manera tan fría, y tan cruel, pero se que no soy capaz de decirte esto mirando tus perfectos ojos, me derrumbaría nada más empezar tu me abrazarías y perdería el valor para decirte que no puedo más. Y no puedo escribir, ni podría decirte que no te quiero porque eso sería peor, sería mentir y no te mereces que te haga algo así.

 Hace dos meses intente hacer esto en persona, y tu pusiste tu mano en mi boca impidiéndome hablar, después me cogiste en brazos y empezaste a correr, yo reía, gritaba que me soltaras, aunque no quería que lo hicieses, y tú que me conoces tan bien apretabas con más fuerza, pero con cuidado. Me llevaste a aquella plaza donde te dije por primera vez “te quiero” y recreaste ese momento. Volviste a poner esa canción que ya no podré escuchar más en el móvil y me hiciste bailar contigo, bailamos hasta que volviste a ver amor en mis ojos, hasta que volviste a sentir que te quería. Es otra de las razones por las que lo hago así, porque eres tan perfecto que siempre sabes reconquistarme. Y aunque por una parte quiero que me calles con besos, que me hagas cosquillas hasta que se me pase el cabreo y que me digas todas esas tonterías que te hacen tan esencial, la pequeña parte sensata  que queda en mi corazón, me dice que  si no me decido de una vez no lo haré nunca y entonces por muchas ideas ingeniosas que tengas, por muchos besos que me des, o por muchas cosquillas que me hagas, la llama de mi odio será tan grande que ni lanzándome a una piscina, o metiéndome en el mar se apagará.

Quién nos iba a decir que lo que empezó como un juego, acabaría en algo tan intenso, porque nadie me aviso que el amor desgarra el corazón y tú no te das cuenta, es más que piensas que se está fortaleciendo. Alguien me puede decir cómo voy a superar esto, si te voy a poder olvidar. Si mi corazón soportará querer a alguien más o si alguien estará a tu altura.

 Cariño, solo te pido un último favor. Sé que es pedir mucho, pero intenta recordar los buenos momentos, las sonrisas entre besos, mis lágrimas, pero las que aparecían en mis ojos provocadas por las risas. Recuerda mis gritos, pero en los que te gritaba cuanto te quería, Recuerda las largas conversaciones que teníamos todas las noches. Las canciones de esos grupos que destrozábamos al cantarlas a la vez. Simplemente intenta recordar que de verdad lo nuestro fue amor y quien diga lo contrario es ciego, y si te queda alguna duda solo te hace falta mirar los gotillones que emborronan este papel, son las lágrimas que no he podido contener, en esta trágica, injusta, fría, triste y cruel despedida.

Bueno, espero que algún día puedas perdonarme por hacerte esta faena, lo necesito, necesito que uno de los dos perdone esto que te estoy haciendo, y creo que vas a ser tu el que lo haga, ya sabes que yo perdono a todo el mundo menos a mí misma

Derramando mi veneno favoritoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora