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sunoo puede oír a sunghoon tarareando cuando llega a la casa del árbol. sube por la escalera cautelosamente, observando.

sunghoon está ahí sentado, prendiendo y apagando el encendedor.

— oye. —dice sunoo, y sunghoon casi deja caer su encendedor del susto.

— hola. —dice él, guardando su encendedor— entra.

— mira, me quiero disculpar..

se ve interrumpido cuando sunghoon se inclina hacia adelante y presiona sus labios a los de él.

el beso dura más que el último, y ahora ambos están participando. la boca de sunghoon es cálida y suave, y sunoo puede sentir su propio corazón retumbando locamente.

las suaves manos de sunghoon suben. una se encaja en la parte trasera del cuello de sunoo y la otra se posiciona en su mandíbula. las manos de sunoo titubean al subir, agarrando los hombros de sunghoon.

finalmente se detienen, y sunoo abre lentamente sus ojos para ver los de sunghoon aún cerrados, luciendo absolutamente contento.

solo se sientan allí por un rato, recuperando el aliento.

— ¿por qué no me besaste de vuelta? —responde sunoo.

— ¿por qué te saliste corriendo? — pregunta sunghoon, interrumpiendo el silencio.

hay otro momento de silencio.

— me gustas. —dice sunghoon de repente. su voz suena distinta— me gustas mucho.

— me gustas mucho también. —dice sunoo, y sunghoon le sonríe.

— genial. —susurra él, besándolo nuevamente.

todo era besos y caricias de dos adolescentes enamorados que poco a poco se convertirá en algo más, algo rojo - negro.

— oye. —dice sunghoon, parando. toma la mejilla de sunoo con su suave mano— ¿estás bien?

— sí. —dice sunoo temblando— sí, estoy bien.

sunghoon deja un suave beso en su frente— dime si es demasiado para ti, ¿está bien?

— está bien. —murmura sunoo— vamos. —de repente siente su garganta seca— puedes- ah.

sunoo no está del todo seguro sobre qué está haciendo, pero se siente bien.

— tan bueno, y- ahh.

— shh. —dice sunghoon suavemente— lo sé, ¿listo? —susurra

— sí —confirma sunoo, cerrando sus ojos— ¡oh! oh, ah..

sunghoon lo besa de nuevo, y sunoo lo besa de vuelta.

— sigue.

sunghoon ríe suavemente, sobresaltado, pero obedece.

ahora sunghoon está murmurando suaves palabras, dulces como las nubes, mientras sunoo vuelve a guardar silencio.

— eso fue.. eso fue.. —por primera vez, hay algo que sunoo no puede describir.

𝑓𝑜𝑟𝑒𝑠𝑡 - 𝑠𝑢𝑛𝑠𝑢𝑛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora