Prefacio.
La brisa revoloteaba con fragilidad en medio de nosotros, mientras yo corría por el verde prado con el aire golpeando suavemente mis mejillas y mis pies descalzos sintiendo el rocío del pasto.
Miré hacia atrás, él venía tras de mí con una sonrisa gigante en el rostro. Me detuve y comencé a dar vueltas sobre mis pies, sintiendo la humedad, aquel fresco aroma a campo, mientras la brisa me acompañaba en mi improvisada danza a la vez que las aves tarareaban su canción favorita y hacían que me sintiera más feliz de lo que ya era.
Unas manos se posaron en mi cintura y sentí cómo caía hacia atrás. Mi cabeza quedó sobre su pecho que subía y bajaba con rapidez y su brazo me rodeaba la cintura mientras me acariciaba con dulzura.
—¿Nos podríamos quedar así para siempre? —susurré en su oído.
Vi como formaba una hermosa sonrisa en su rostro y me miraba con sus intensos ojos cafés.
—Si es lo que tu quieres, mi amor. ¡Te daré todo lo que quieras! —exclamó y me dejó un pequeño beso en la frente.
Reí feliz y lo abracé aún más. Quedé sobre él, mirando aquellos ojos de los cuales me había enamorado. Tomó mis manos entre las suyas y entrelazó nuestros dedos.
—Prométeme que cuando estemos casados tocarás el piano todos los días para mí.
—Te lo prometo, mi cielo. ¿Sabes por qué? Porque te amo. Te amo más que a mi vida. Sin ti, mi vida sería una completa agonía. Caminaría por un destino incierto, sin saber cual es mi misión en este mundo. Mi misión es hacerte feliz, darte todo lo que quieras, es amarte.
Posé un beso en sus labios y sonreí.
—No te vayas… —murmuré sobre su boca—…por favor —sentí como mi voz se cortaba—. Se han perdido muchas vidas en la guerra y no quiero que la tuya sea otra…
—Debo hacerlo, mi amor. Por mi país. Por ti. —me acarició la mejilla mientras me miraba fijamente a los ojos—. Y cuando regrese nos casaremos, compraré la casa que más te guste, tendremos bellos hijos y tocaré el piano todos los días para ti, mi vida. ¿Está bien?
—¿Me lo prometes?
—Te lo prometo.
Y selló esa promesa con un beso.
Pero esa promesa jamás se cumplió. Se desvaneció en el aire que nos rodeaba que además de llevarse su palabra, se lo llevó a él y a nuestro amor.
Él jamás volvió.
Él se había ido…para siempre.
¡Hola!
Esta es una historia corta de amor de Zayn. No tendrá más de diez capítulos, es bastante breve. Me gustaría saber qué opinan de ella, para subirla o no. Si les gusta la idea y quieren seguir leyendola o mandarme a la mierda porque es mala. JAJAJAJ, acepto cualquier comentario <3.
Espero que les guste la idea y me apoyen con esta pequeña historia que les prometo que será hermosa.¡Las amodoro!
ESTÁS LEYENDO
Teclas negras. (Zayn Malik)
Short StoryLa música seguía sonando. Seguía sonando a pesar de que la lluvia golpeaba con ferocidad contra la ventana. Aún se escuchaba. Era imposible. Era completamente imposible que la música se escuchara por sobre la lluvia. Era completamente imposible...