" Train station " [ChuuAku]

'Capítulo 1'

"Pistas"

El cielo está gris, todo esta opacado gracias a una extensa capa de neblina la cual hace que se dificulte el camino a algunas personas. En esa estación, los viajeros van de un lado a otro, algunos despidiéndose y otros esperando su transporte. Los hombres están con trajes y con sombreros, muy formales, mientras que las mujeres usan vestidos de colores no tan llamativos. Algunos portan maletines, otros maletas y algunos simplemente cajas.

Hay tantas personas, tanta sofocación, tanto acercamiento que incluso los ladrones aprovechan para saquear a la gente que está apresurada. Los policías están cerca de algunos alrededores, pero solo son dos que cumplen su labor de vigilar el área.

Toda la gente se amontono detrás de la línea blanca que marcaba el suelo, algunos corrieron y otros empujaron para observar la llegada de esta tan conocida locomotora de color negro, con sus ruedas que son rapidas pero al mismo tiempo ruidosas al frenar, su tipo vapor de la locomotora. El tren se detuvo en seco asiendo chirrinar las ruedas con la vías.

Al abrir las puertas bajaban las personas con sus cosas, al parecer con cansancio pero con apuro. Solo esperaron unos cuantos segundos para que luego salga el maquinista y grite: " Subáis de una vez, ya vamos a partir".

Los presentes se apresuraron, con empujones y choques logrando al fin subir al transporte. Todos tomaron asientos donde decía su boleto, así que el maquinista tocó el silbato y la locomotora comenzó a botar vapor avisando que ya parten hacia su destino.

Un esmoquin rojizo color vino, con una camisa blanca, su sombrero negro con una cinta roja alrededor, su cabello anaranjado moviéndose rápidamente, su pequeño maletín y con su bastón corre hacía la máquina que avanzaba de poco a poco, sus pasos son ligeros pero rápidos haciendo que se acerque cada vez más. Empujó a uno o dos personas pero logró saltar y llegar a la entrada de la locomotora, entró importándole poco que lo regañaran. Puso sus cosas en el suelo y se acomodó su pequeña coleta que colgaba de un lado de su hombro.

—Nunca más vuelvo a beber antes de partir.— se prometió a si mismo el joven de traje elegante rojizo. El caballero de ojos azules muy llamativos y con un hermoso brillo camino un poco por ese pasillo buscando el lugar que le indicaba su boleto.

Busco y busco hasta que encontró su asiento, fue un poco lamentable que estuviera ya ocupado. Si fuera una persona tímida y vergonzosa buscaría otro asiento, pero no, este joven de cabellera anaranjada se acercó al hombre que esta en su asiento. Lo observó con molestia y sonrió con amargura.

—Disculpe caballero, pero este es mi asiento.— dijo —Lo dice acá en mi boleto.

—¿Y?, Llegaste tarde, largate a otro lado.—  contestó el señor al parecer un poco ebrio, toda persona cuerda sabría que discutir con un ebrio es la peor idea pero para nuestro oji-azul es la mejor.