Mask.

Capítulo Único.

Robín, su líder, un gran pilar para el equipo, una gran persona, y por supuesto un gran amigo, hijo adoptivo de Bruce Wayne, encantador y rompe corazones como su padre, el tenía cierto encantó.

Encantó que atrajo a Starfire a él, Encantó que llamó la atención de cierto demonio, su padre le había dicho algo de eso "Los demonios nunca se enamoran", pero ella no era un demonio, era la mitad de uno.

Pero Tokyo rompió su corazón, esa escena de su beso bajo la lluvia la había dañado, al llegar a casa se encerró directamente en su habitación, observando desde las sombras como todos se alegraban por ellos, menos ella.

Una noche ambos habían quedado solos, Star salió a hacer las compras junto con Jinx, Cyborg tuvo una pequeña cita con Karen, y chico bestia, chico bestia solo salió a ser la tercera rueda de la cita de Cyborg.

─Hola Raven.─Saludo Robín con una mano a la pelimorada que entró a la sala.

─Hola.─correspondió su saludó con su típico tono apagado, camino hasta la cocina de donde sacó su té para irse a leer un libro en su habitación.─¿Donde están los demás?.

─Bueno, Star salió de compras con Jinx, Cyborg tuvo una cita con Bee, y chico bestia les hizo compañía, así que estamos ambos aquí, solos.

─Oh, ya veo.─murmuró la pelimorada.

─Se que vas a ir a leer un libro, pero, ¿Que tal si cuando termines vienes a hacerme compañía?, por alguna razón no quiero estar solo.

─Claro, podría hacerte compañía ahora, de todos modos el libro no es tan importante.─Raven se esforzó por sonreír, Robin se confundió por sus palabras, Raven nunca dejaría una lectura, y menos para congeniar con alguien.

Ella se sentó a su lado y observo al televisor frente a ella, Robin ojeó los canales en busca de algo interesante, o al menos que Raven dijera que le llamaba la atención algún título.

─¿Quieres ver alguna película de Los chicos?.─pregunto el pelinegro bajando el control.─¿O prefieres Charlar un poco?.

Raven se giró a verlo, tomando el control de la mano de Robin para apagar la gran pantalla.

─Si no te molesta prefiero la Charla.─hablo bajando de nuevo
el aparato.

─La charla será.─contesto el chico maravilla animado y con una sonrisa,─He notado que ya te has vuelto más abierta Raven.

─Si, creo que sí, aún no me acostumbro pero, es lindo sentir alegría, tristeza, ira, celos sin invocar demonios.─ella se encogió de hombros con media sonrisa en sus labios.

─¿Celos?.─cuestiono el ojí azul.─¿Has estado celosa de alguien Raven?.─La hechicera se sonrojo por esa pregunta atrevida.

─N-no.─pronuncio enfríando su te.

─Sabes que no puedes mentirme Rae.─el río sin mucho escándalo.─Te he notado rara desde lo de Tokyo, ¿Paso algo allá?.─trato de indagar, Raven la verdad es que no podía mentirle, el era su apoyo, el sabía más de ella que cualquier otra persona en el equipo.

─No, nada en lo absoluto.─contesto tomando de su taza.

─Por favor Raven, déjame indagar, déjame ver tras esa máscara que oculta tus sentimientos, se que debo darte tu espacio, pero quiero saber, quiero saber si sientes algo por alguien, quiero ver lo que hay debajo de tu caparazón, no hay trigon que pueda amarrarte a tu oscuridad, no hay muros que impidan mostrár tus emociones, no hay más cadenas.

─Robín....

─Dick.─interrumpió el.─llámame Dick.

─Dick, se que quieres saber, y que has sido muy comprensivo conmigo al respecto de mis emociones y todo esto, pero aún es difícil mostrarlo, se ha vuelto parte de mi, pero hagamos un trato.