—JAJAJAJA LOS PARTIRE POR LA MITAD —se carcajeaba alguien con una máscara de hockey partiendo una mesa a la mitad con su moto cierra.
Los integrantes de la mesa que fue partida a la mitad salieron despavoridos del restaurante al ver tal escena, al igual que el resto las personas que había en el restaurante.
—AAAAHH LA NIÑA DEL ARO! —gritaba una mujer aterrorizada cuando estaba por salir del restaurante.
Una niña vestida de blanco con la cara cubierta por su cabellera negra estaba obstruyendo la salida del restaurante, todos se quedaron congelados al ver eso.
Del baño del restaurante salió otra niña, que se veía de la misma forma y se acercó a la otra.
—¡DOS NIÑAS DEL ARO! —grito una mujer.
De la nada las niñas empezaron a bailar dejando con la boca abierta a los que presenciaba ese ridículo, pero macabro show.
El chef y unos ayudantes salieron de la cocina portando escobas y un cucharón, logrando así expulsar a lo que sea que sean ellos.
Las dos niñas del aro y Jason en miniatura salieron huyendo del restaurante siendo perseguidas por un chef enojado.
A medida que huían se les fue volando las pelucas y Acuario tiro la máscara ya que se le dificultaba respirar mientras corrían.
—Come here unfortunate, I do not know dare to scare my clients! —les grito en inglés el chef deteniendo se en la esquina por el cansancio.
—Yo no enterdeirshion —le grito de vuelta Acuario cruzando la calle entre risas.
Después de unos metros las chicas se detuvieron a recuperar el aire.
—Eso... Fue genial —jadeo Piscis recostando se en el suelo.
—Lo más divertido fue ver sus expresiones de horror —dijo Cáncer riéndose.
—¡Si! ¡Habría que hacerlo de nuevo en otro restaurante! —propuso entré risas Acuario, sosteniendo con dificultad la cierra que tenía en las manos
—¡Si, hay que... — Cáncer se detuvo abruptamente al ver algo que estaba en la carretera, justamente lo que observaba era un perrito que se encontraba en medio de ahí.
Cáncer rápidamente fue hacia el perrito que estaba en la carretera, ya que un auto se aproximaba y el animal seguía ahí.
—¡Te tengo! —rápidamente volvió a la vereda con el pequeño animal en sus brazos, era pequeño y estaba desnutrido.
—¡Cáncer! ¡Maldita loca, no hagas eso! —le reprochó Piscis al estar al lado de la chica.
—¡¿Por qué mierda hiciste eso?! ¡Pusiste...! —Acuario se detuvo en su regaño al ver al animalito— ¿Y ese perrito? Está algo flacucho, pero es adorable
—La ví en medio de la ruta y tuve que ir a buscarla antes de que la atropellaran y por cierto, es hembra —explicó Cáncer acariciando a la perrita—. Habría que buscarle un nombre.
Las tres se quedaron viendo al animalito pensando en que nombre le quedaría, debía ser un nombre súper genial.
—¡Umma! Cómo la villana de descendientes —propuso Acuario sonriente.
Acuario, la gran nombreadeora, si es que existe eso.
—Mmh... No está mal, me gusta.
—A mi también, Umma será. Pero no aceptan animales en el hotel —les recordó Piscis en tono de alarma.
Acuario y Cáncer se encogieron de hombros con diferencia, como si le importara las reglas de un hotel.
—Bah, da igual. Le pedimos ayuda a Escorpio y la infiltra mos en el hotel, así de sencillo —contesto con tranquilidad Acuario y Cáncer asintió apoyándola.
—¿Y cómo lograrán convencerlo a hacer eso?
Estaba claro que eso iba a ser difícil, y Piscis le tenía cero fé. Ella conocía muy bien a Escorpio gracias a que aveces se ponía en modo acosadora. Cosa que no admitiría jamás.
—Con unas galletas de chocolate de Cáncer bastará —afirmo Acuario con seguridad—. Cualquier cosa Cáncer le dará cien pesos para que acepte.
—¡Sí! Espera, ¿Qué?
—Sito.
—¡Maldición!
—Suficiente con eso —sentencio Piscis—. Hay que hacerlo.
Las dos chicas chocaron los cinco en modo de celebración al haber convencido a Piscis para que fuera parte de la misión.
—¡A la carga!
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.—Mas tonto no podés ser, ¡¿Cómo puedes derretir el colador?! —le reprochaba Tauro a Sagitario.
—Era mucho aceite para hacer las papas... Y pensé que si colocaba el aceite no desperdiciaría papas y no se caerían al piso o algo...
Esa era la idea más estúpida que había escuchado en su vida.
Pero algo de lógica tenía, o al menos para Sagitario.
—Como sea, derretisté un colador plástico, aunque tú idea no hubiera sido tan mala si el colador fuera de acero, pero ya fue —dijo la chica con cansancio, para luego sentarse sobre la isla de la cocina.
—Es tú culpa, vos querías papas aunque nos comimos todo un buffet —le recriminó Sagitario— ¡No sé cómo sigues teniendo hambre!
—Mi estómago es un agujero sin fondo, pensé que ya estaba claro eso.
Se quedaron viendo fijamente con seriedad, hasta que Sagitario hizo la nariz como gorila y Tauro no puede evitar reírse.
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Hola, cuánto tiempo, eh.
¿Me extrañaron? Seguro que si pero me quieren matar por desaparecer jajaEspero que disfruten el cap y muy pronto sacaré la continuación del capítulo ^^
Bye-bye.
Nai.
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La Caza Del Zodiaco
RandomEntra y lee las locas aventuras de los signos. Descubre sus amores y conflictos. -No a la copia de libros. -No se permiten adaptaciones o copias sin permiso.