- f o u r.

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— 𝗖𝗢𝗠𝗣𝗥𝗔𝗦

Al despertar, Spreen tenía un ligero dolor de cabeza, su cuerpo dolía igualmente por haberse quedado dormido en el sofá el día anterior.
Ignorando sus malestares se levantó y caminó por el departamento -que ahora era su nuevo hogar- abriendo las puertas en busca del baño, quería saber sí podía tomar una ducha antes de salir a explorar el nuevo mundo en el que se encontraba.

Afortunadamente, encontró la puerta del baño, había una bañera lo que significaba que podría darse la ducha que quería.
El pelinegro trató de comenzar a quitarse la ropa, como normalmente lo haría en su realidad, pero al parecer ésto no funcionaba aquí.

La ropa parecía estar pegada a su cuerpo, aún cuando ésto no se sentía así, traer esas prendas era cómodo y fresco; pero al no poder quitárselas comenzaba a ser molesto y darle una sensación de calor.

Spreen se rindió unos minutos después, quería llorar por haber perdido una batalla tan fácil como lo era el ducharse.
Su mente hizo "click" unos segundos después y salió del baño caminando hasta la puerta principal del departamento, la abrió y salió al pasillo.
Miró hacía ambos lados, viendo primero hacia la derecha notando que de aquel lado estaban las escaleras a los pisos interiores, y a la izquierda solamente una puerta en la pared contraria justo al final del pasillo, tal como lo habia dicho.. ¿cómo se llamaba aquel chico?

¿Leonardo? ¿O quizá Luis? Estaba seguro que su nombre empezaba con la letra L, pero no podía recordar correctamente su nombre, algo un tanto típico de él.

Mientras trataba de recordar el nombre del castaño, Spreen se dirigió con pasos lentos hasta la puerta al final del pasillo, y una vez estuvo al frente, suspiró y tocó la puerta.

Uno. Dos. Tres golpes creyó que eran suficientes para llamar la atención de su vecino, sí es que éste se encontraba despierto, lo que esperaba fuera así porque no quería molestar tan temprano.

A todo ésto, ¿qué hora era? Ni siquiera había visto la hora, levantó su mano izquierda para hacer aparecer la pantalla holográfica, esperando que en algún lugar dijese la hora.

Estaba por comenzar a mover por toda su pantalla en busca del reloj, cuando la puerta se abrió frente a él, mostrando a el menor todavía con su pijama y los castaños cabellos un poco despeinados.

- ¿sucede algo?

Preguntó el menor alzando una ceja al ver a Spreen con la misma ropa que el día anterior, su pantalla en un lugar random y la cara con un notable ceño funcido por los acontecimientos pasados.

- yo.. -murmuró Spreen, bajando su mano izquierda desactivando su pantalla, se sacudió la mano en la ropa y siguió hablando.- quería darme una ducha.

- okay.. ¿y qué con eso?

Preguntó ahora Lucas, un poco más confundido sobre el porqué Spreen tocaba su puerta tan temprano, él simplemente podría ducharse a menos que..

- no sé como quitar mí ropa, intenté hacerlo pero simplemente no pude.

Explicó Spreen soltando un suspiro, le estaba resultando muy cansado todo aquello, sin embargo, estaba seguro que ésta situación no se repetiría nunca más una vez supiera como quitar su estúpida ropa.

Lucas al contrario, habia comenzado a sonreir, amenzando con empezar a reírse por la situación en la que se encotraba el pelinegro, cosa que no hizo ya que no quería irritarle más.

- en tu pantalla, está el ícono de una camiseta, sí le das ahí además de poder ver todas las prendas que tengas y su durabilidad, abajo a la derecha estará la opción de editar vestimenta, podrás quitarla y ponerla cuando quieras.

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⏰ Última actualización: Apr 06, 2023 ⏰

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