CAPÍTULO 35

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Un fotógrafo se nos acerca.

– Señor Grey me permitiría una foto.

– Claro.

Tomó a Ana de la cintura y sonreimos a la cámara.

Caminamos por lo pasillos del vestíbulo, algunas personas miran a Ana y otras mas le saludan.

Llegamos a un pasillo donde hay siete fotografías de Ana en blanco y negro.

Se ve muy feliz y relajada, en unas hace pucheros, en otras sonríe y hace biscos y una que en verdad me encanta, es Ana en un prado con unas pequeñas flores moradas, mirando hacía ellas va vestida con una blusa azul rey de manga larga con en canje de colores y una diadema azul y su cabello planchado, se ve muy hermosa.

– Me gustan las fotos.

– Ni siquiera me dijo que las iba a exponer.

Se queda mirando las fotos, así que voy al mostrador, quiero esas fotos sólo para mis ojos, si el pervertido que se la coma con los ojos tengo que ser sólo yo.

– Quiero comprar las fotos de aquel pasillo.- le digo a la rubia que está ruborizada y le señalo el pasillo.

– Lo siento señor pero algunas ya están en venta.

Sacó mi American exprees y se la doy.

– Lo que sea por ellas.

– Esta bien señor Grey.

Hace todos los procedimientos necesarios y me entrega la tarjeta.

– Hecho señor Grey.

– Las quiero lo antes posible.

– No será posible señor Grey ya que se estarán exponiendo enas lugares.

– Deacuerdo entonces después las quiero lo antes posible

– Así será señor Grey.

Me voy de nuevo con Ana.

–¿ Comprastes alguna foto?

– Las compré todas.

– Oh...

– Si, algún pervertido te va a comer con los ojos en la soledad de su casa ese tengo que ser yo.

– Jajaja...

– Me gustas así, como éstas en las fotos relajada y feliz, quiero verte así más seguido pero conmigo.

– Tu me intimidas...

– Quiero que te relajes más, ahora vamos a cenar.

– No, nos podemos quedar un rato mas.

– No Anastasia nos vamos ya.

– Esta bien sólo md despido de José.

– Apurate.

Va y se acerca a José que está entre un grupo de chicas, «Ja, escojete a alguna de ellas por que Ana es Mía».

Se acerca y creó que José también se da cuenta de que está más flaca.

Se dan un abrazó y José Mierda Rodriguez la levanta en el aire y le da vueltas, Ana le da un besó en la mejilla y la irá corre por mis venas.

Me acercó a ellos.

– Nos vamos Ana.

– Si, claro.

Un nuevo comienzo con Grey [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora