Renacer | Hypnosis Mic AU Hogwarts

Eleccion de Casa

Se podía oír el bullicio detrás de aquella gigantesca puerta de madera que daba al gran comedor. Los más pequeños se notaban nerviosos y ansiosos, tal vez preguntandose como seria la elección de casas o como sería el día de mañana, cuando las clases dieran inicio.

En cambio los mayores, se encontraban en silencio, un silencio muy incomodo y frío a diferencia de hace unas horas.

Azazel intentaba captar la mirada de su hermano y saber que era lo que pasaba por su cabeza, en cambio Enka y Galaxy se preguntaban por la actitud de la profesora, quien se había presentado anteriormente como Minerva Mcgonagall, la encargada de la casa de Gryffindor.

Y Emmett, su mirada estaba clavada en la puerta frente a él, sus ojos se habían oscurecido una vez más y sus manos formaron puños tan fuerte que sus nudillos se veían blancos. En su cabeza se reproducían diferentes escenarios de lo que podría pasar al atravesar aquel portal al comienzo de su nueva normalidad.

El estruendo de las puertas al abrirse calló a todo el comedor, los niños de primero pasaron y comenzaron su elección, mientras los demás más grandes esperaban su respectivo turno en el umbral. Habrán pasado 20 minutos hasta que paso el ultimo niño de primer año, el cual quedo en Hufflepuff. Minerva observo a los jóvenes adolescentes y asintió.

— ¡Galaxy Denovan! —. La nombrada salto sobre su lugar debido a la sorpresa mezclada con los nervios.

Miró una ultima vez a sus compañeros quienes le dedicaron una suave sonrisa de tranquilidad y avanzó por el Gran Comedor, pasando entre las mesas de Gryffindor y Slytherin, llegando finalmente al banco frente a Mcgonagall, quien sostenía al sombrero seleccionador.
Una vez estuvo sobre su cabeza todo fue silencio y espectativa, las casas esperaban un nuevo miembro que les de orgullo o un amigo, sus nuevos amigos esperaban su turno, esperando también poder estar en la misma casa.

"— Mmm ¿Que tenemos aquí?
Sí, alguien amable como un tejón, inteligente como un águila.
No, hay algo más.
Si...valentía, fuerza, determinación. —."

Un fuerte grito proveniente del sombrero rompió el silencio con euforia.

— ¡GRYFFINDOR! —. La respectiva casa de rojo y dorado vitoreo y recibió a su nueva miembro con saludos de bienvenida y presentaciones rápidas.

Con una gran sonrisa miro a sus amigos en la entrada y levanto sus pulgares con felicidad, deseándoles suerte.

Otros tres chicos fueron llamados antes de que les tocara a uno de ellos, dos quedaron en Slytherin, donde fueron recibidos con orgullo y vanidad por las serpientes, y otro termino en Ravenclaw donde recibió saludos cortos y cordiales.

— ¡Enka Monroe! —. La nombrada sonrió con nerviosismo y miró a los hermanos con miedo.

— Todo irá bien. —. Aseguraron los hermanos.

La rubia soltó una suave risa y negó, si no fuera por la diferencia de alturas creería que ambos son gemelos.

Con paso seguro y frente en alto camino hasta el pequeño banquillo y respiro hondo.

— Todo bien. —. Murmuró una vez que se sentó y el sombrero fue colocado sobre su cabeza.

"— Interesante.
Si, eres una joven fiel de corazón, amable, fuerte.
Esto sera muy sencillo. —."

— ¡HUFFLEPUFF! —. La mesa de los tejones grito de alegría y recibió a la rubia con abrazos y saludos amistosos.

Desde la mesa de los leones fue saludada y felicitada por Galaxy y otros de sus compañeros.

Minerva observo la lista en sus manos e ignoro el ante ultimo, saltandoselo con intensión.

— ¡Azazel Climoore! —. El cálido silencio que había recibido a los demás alumnos fue quebrado por los murmullos de las diferentes cosas, incluidos los tranquilos Ravenclaw.

"¿Climoore?"

"¿Tendrá relación con ese?"

"¿Como dejan entrar a alguien así aquí?"

Emmett le dio un leve apretón al hombro de su hermano en un intento de reconfortar lo y darle seguridad.

— Tu puedes, recuerda que estoy aquí. —.

Los pasos del pequeño Climoore eran indecisos y lentos, casi temblorosos, la atención estaba centrada en él y las miradas eran afiladas como cuchillas nuevas. Sus pensamientos estaban fragmentados y mezclados por la incertidumbre y el miedo.

El sombrero fue colocado en su cabeza y todo volvió a ser silencio.

"— Oh, pero que tenemos aquí.
Esto sera interesante.
Tienes miedo pero eres determinado, tienes valentia, quieres proteger a tus seres amados y para eso necesitas poder.
Si, ya lo tengo. —."

— ¡SLYTHERIN! —. La casa de verde y plata recibió al sorprendido chico con orgullo y elegancia.

La mirada de cierto mago anciano se posó sobre el único chico que quedaba en aquella gran puerta. Su mirada fue percibida por el menor y devuelta. Alzando su copa de jugo de calabaza le deseo suerte en silencio al joven Climoore quien le respondió con una sonrisa y un guiño.

Minerva al notar esto sonrió y anunció el ultimo nombre de la noche.

— ¡EMMETT CLIMOORE! —. Un silencio sepulcral se cernio sobre el Gran Comedor. Sus pasos fuertes y su mirada decidida eran ciertamente intimidantes y esto comenzó a crear reacción entre los estudiantes.

Enka escucho con atención lo que la chica sentada junto a ella decía.

— ¿Como es que dejan entrar a un asesino a la escuela? —. Murmuro con un tono áspero y frío.

— ¿Asesino? —. Pregunto sin darse cuenta.

— ¿No lo sabes? Emmett Climoore estaba encerrado Azkaban por matar a su padre con la maldición asesina, se dice que era seguidor de...ya sabes quien. —. Su única respuesta fue ver en dirección en la que se encontraba el chico, ya sentado en el banquillo y con el sombrero sobre su cabeza.

El recuerdo de su reciente encuentro con el joven volvió a su mente.

"Emmett...¿un asesino?"

En cambio Galaxy observaba con confusión a todos aquellos que murmuraban, los leones eran quienes más hablaban sobre el tema.

— Dumbledore debe querer que nos mate a todos. —. Comento un chico que se encontraba sentado frente a ella.

"— Mmm....Emmett Climoore.
Tienes la misma mente que tu madre, brillante, decidido, valiente, ambicioso, eres un buen chico, ambos lo sabemos.
Solo quieres protegerlo.
Bien, para eso necesitas mucho más poder.
Suerte Emmett. —."

— ¡¡SLYTHERIN!! —. La casa de las serpientes vitoreo con gritos y aplausos,  incluso algunos se levantaron para recibirlo cuando se acerco a la mesa.
¿Que mejor para las serpientes que alguien intimidante y fuerte?