Mi corazón errante vaga en los mares de tu ausencia. Aferrada de suburbios en corazones vacios como el silencio, sin más pretexto me abrazo a la nostalgia, en estancias de otras muertes sin sentido, vivo como esa comedia silente que son tus labios y declamo la basta nada cómo única testigo de estos recuerdos. Mi corazón errante no entiende de puertos y llegadas, vive en la partida de algun vuelo, en las palabras gastadas dichas al filo de la noche. Su única bandera tu nombre, de escudo la soledad, pero la basta nada revela espejos sin tu piel desnuda, relojes sin sucesos de tiempo, el mismo tiempo que destronó mi calma de ti...
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Después de volver
PoetryCuesta regresar al mismo sitio después del hecho, imaginando arrojar tu sexo sin saber volar, cuesta recaer en la escena sin más crimen que el silencio, sabiendo de ese sabor en tu lengua y mis ojeras sin sueño. De mil palabras dichas a las paredes...