Hay palabras atascadas y sentimientos haciendo combustión en su interior, Chifuyu realmente está sorprendido de no prender en llamas de un momento a otro.
portada: @shoegayziscool ♡
Nota: ¡Hola! originalmente postee la versión en inglés como un oneshot en ao3, en esa versión tiene 5k+ palabras, cuando estaba traduciendolo al español decidí no sólo dividir esto en capítulos, sino también escribir unas cuantas partes más porque he decidido que quiero arreglar unas cuantas cositas del canon (? no sé cuántas partes irá a tener pero seguramente va a ser un minific. Esto está ubicado antes del bloody halloween, y la pequeña canon divergence es que Chifuyu tiene 18 años y Baji 19. Son mayores de edad.
Espero les guste <3
Disclaimer: Tokyo Revengers y sus personajes son propiedad de Ken Wakui.
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El otoño está a la vuelta de la esquina, a Chifuyu le desconcierta hacerse consciente de ese detalle porque de alguna manera, se siente como si el primer día de verano hubiera sido a penas hace algunas semanas. El correr del tiempo siempre ha sido algo muy difícil de asimilar para él.
Cuando piensa en ello, centrarse en el presente es todo un reto considerando que sus decisiones del pasado lo atormentan constantemente por las noches y el futuro parece y se siente más como un espectro que lo aterra debido a lo impredecible que puede resultar.
Pero una vez que contempla su entorno con detenimiento, la presencia de la estación otoñal es innegable, haciéndose notar cada día más en las pequeñas cosas del ambiente. El viento helado juega con su cabello mientras él se mantiene quieto, aquello se siente casi como una caricia, como un saludo.
El cielo está coloreado por diferentes tonalidades de rosa y anaranjado que se funden entre ellas, la mezcla de colores hace que su corazón se contraiga, el escenario ante sus ojos luce inmensamente bello y nostálgico. Chifuyu no sabe si "nostálgico" es un adjetivo que él inherentemente atribuiria al cielo, pero es nostalgia lo que siente siempre al admirarlo.
Su vista permanece posada en el atardecer, a ratos se pierde en sus pensamientos pero sigue atento a como desaparece el sol minuto a minuto en el horizonte. Chifuyu no puede evitar pensar en él.
Últimamente no hace más que pensar en él si se permite un poco de honestidad, más frecuentemente de lo que le gustaría admitir su mente evoca risas aterciopeladas, sedosos mechones oscuros y ojos jodidamente preciosos.
El rubio sabe que la manera en la que llega a pensar sobre él a veces no tiene nada de platónica, ya ha tenido un número considerable de crisis debido a esta razón, pero justo ahora no tiene el tiempo ni el estado mental para poder preocuparse y debatir al respecto.
Chifuyu suspira abatido, sus pensamientos se desvían de tal manera que se siente abrumado, así que en un intento por tranquilizarse, inhala profundamente, cerrando sus ojos y exhala, tratando de imaginar que los pensamientos negativos le abandonan, esperando que aquella acción le ayude a aclarar su mente.
