primera carta y tal vez la última.

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primero quiero decir que esta es mi historia y no tiene nada de ficticio, hay algunos aspectos de mi vida privada que nunca publicare pero en este momento me veo en la necesidad de expresar lo que siento y el por que del asunto, comenzare desde el inicio. 

15 de abril de 1999 

era un día común y corriente en un hospital común, con personas comunes y una mujer embarazada común, esa mañana un cuarto para las 6 nació una pequeña niña midió 52cm de largo y peso tan solo 3,360k bastante pequeña en cuanto a peso, fue nombrada Angela Denisse Arriagada Rebolledo, esa era yo, cuando era pequeña en más de una ocasión mi tía que vivía al lado de la casa de mis padres me llevaba a su casa sin avisarle a nadie a lo que mi madre termino por acostumbrarse, crecí como cualquier niña pequeña, con un padre juguetón y trabajador y una madre esforzada y ama del hogar aunque odiaba hacer los quehaceres, tengo una medía hermana y un medió hermano por parte de padre, ellos y su madre estaban presentes constantemente en mi infancia aunque siempre me sentí mucho más apegada a mi hermano, entre mis 2 y cuatro años no lo recuerdo muy bien mi padre se fue a trabajar fuera de Santiago de Chile, mi ciudad y país natal, luego de estar un tiempo trabajando allá una mañana mi madre estaba cocinando, lo recuerdo muy bien, y recibió una llamada de teléfono, la contesto y comenzó a conversar con José con una clara expresión de preocupación, y luego vi lo que ningún niño quiere ver, mi madre comenzó a llorar, yo ya sabía lo que era eso me levante me acerque a ella y con mi infantil voz pregunte lo obvio - ¿estas llorando? - mi madre al ver mi preocupación siguió llorando pero me abrazo, en ese abrazo yo sentí el dolor de cada una de sus lagrimas y me dijo con la voz entrecortada y sollozante que mi padre no iba a regresar, luego de esa noticia ambas estábamos sumergidas en un mar de tristeza, llorábamos por los rincones y poco mi madre se preocupaba de su alimentación y la mía, recuerdo que casi no comía aunque mi madre me lo pidiese, gracias a la depresión y la desnutrición comenzaron a salirme yagas en distintas zonas del cuerpo, un día recorriendo una de las llamadas ferias populares, el roce de mis piernas provoco una herida, en ese momento mi madre me llevo al medico preocupada el cual le dijo que debía aumentar las proteínas, vitaminas, hierro, calcio etc.. etc... luego de eso mi madre cambio rotundamente su estado de animo, encontró un trabajo y por ello nos debimos cambiar varias veces de casa, alrededor de una o dos veces por año, terminamos viviendo en la casa de una de mis tías (no la que me secuestraba y consentía, otra) ella tiene dos hijas mucho más grandes que yo, iba al colegio pero yo solo tenía un amigo, Cristian, el tenía problemas de esquizofrenia debía medicarse y al ser diferente todos se alejaban de el, menos yo. 

una tarde mi madre llego del trabajo con quien parecía ser su pareja, salimos con el luego de una gran charla,  salimos a caminar, en ese día comí mí primer manjarate un postre muy conocido aquí, creerán que es una estupidez pero ese pequeño gesto me hizo feliz, él me tomo y me sentó en sus hombros, ese día le pregunte si le podía decir papá, había encontrado una figura paterna por fin, paso el tiempo y sus visitas eran muy frecuentes, luego comenzamos a vivir los tres juntos como una familia, en l que también nos estuvimos mudando bastante seguido pero ya no estábamos solas, al tiempo después comenzaron a discutir y se convirtieron en ese tipo de familia de terminan-vuelven a cada poco tiempo, se arreglaban al poco tiempo así que a mi no me importaba, el problema comenzó cuando comenzaron a agredirse verbalmente, a mi de verdad me afectaba y dolía, además odiaba que el tratara tan mal a mi mamá. 

a mi madre en su trabajo le entregaron una casa temporalmente con el propósito que no robaran nada en ella al verla habitada, a los 10 años me cambie de colegio ya que la escuela a la que había asistido desde los 8 años me quedaba demasiado lejos, en ese año de colegio todo fue un infierno, me discriminaban por que debía usar lentes, no tenían mucho aumente, así que encontré la solución, me tenía que sentar más adelante simplemente, en ese colegio encontré mi primer y segundo amor,  que no fueron más que eso, un enamoramiento de pre pubertad, solo ellos eran mi apoyo, en los baños del colegio me empujaban, barias veces me hacían caer y tropezar a propósito, me propinaban insultos y la dirección del establecimiento nunca hizo nada para cambiar la actitud de sus alumnos decían que eran cosa de niños, mi madre hasta hablo con los padres de la niña que más me agredía, pero sus padres eran tan hostiles que hasta llegue a entender el porque de que ella fuese así, pero a pesar de perdonarla y entenderla ella seguía arremetiendo conmigo, mi madre me había confirmado durante los últimos meses del año que volvería a mi antiguo colegio, solo debía aguantarlo unos meses más, el ultimo día de clases llego a algo que me saco de quicio, me golpeo el rostro, no lo toleraría (las rebolledo odiamos que nos toquen el rostro si quieres que te partan la cara golpea a una de nosotras en el rostro y veras) me abalance sobre ella y comenzamos una pelea en la cual yo no pelearía con las manos estiradas, dando cachetadas, mi padrastro me decía que si algún día peleaba debía pelear a puño cerrado y no como una cobarde tirando el cabello, y eso hice, la golpee hasta que me canse, no diré que no recibí golpes por que ambas quedamos bastantes agredidas aunque creo que ella termino peor o es lo que mi orgullo me hizo ver, cuando llegue a la casa y vi a mi madre llore, de dolor e impotencia, nunca había peleado a no ser de una pelea de juego con mi padrastro o mis primos, el siguiente año mí madre ya me tenía matriculada en mi otro colegio, en el que todos me conocían y me trataban bien, llegue y me recibieron con un enorme abrazo, pero esto recién empezaba, al poco tiempo mi madre se entero de que mi padrastro le había sido infiel, terminaron por un tiempo muy largo, de un momento a otro me dio un ataque de preocupación por la salud de mi madre y le prohibí rotundamente fumar, a los tres meses de eso me entere de que mi madre tenía ya 3 meses de embarazo, en ese momento dejo el cigarrillo rotundamente de un momento a otro, mi padrastro se entero y mi madre lo perdono, yo estaba demasiado feliz, pero ese año casi repito curso, cuando mi madre se entero, salió del lugar pero no molesta decepcionada, y la volví a ver llorar, nunca más, luego de salvar ese año y no quedar repitiendo curso, mis notas cada vez eran más altas y si bajaban un poco se mantenían en un promedio bueno sin ningún rojo, termine toda relación con mis malas amistades.  el siguiente año todo parecía mejorar tenía tres amigos hombres, muy buenos amigos, mi hermanita crecía bien, pero como parece que el destino no me quería dejar en paz, el embarazo se complico, mi madre tenía miomas en el útero, el problema no era ese el problema era que crecían con el bebé, podía poner la vida de ambas en riesgo, el 14 de julio del 2011 se programo una cesárea en una clínica, todos estábamos horriblemente nerviosos, sobre todo yo, caminaba de un lado a otro, de un lado a otro, me era imposible quedarme quieta, esperamos como 3 horas y cuando mi padrastro salió llorando, mi corazón se detuvo, todos corrían a abrazarlo llorando con él y yo estaba estática, camine hacia el y me abrazo diciéndome - tu mamá y tu hermana están bien, todo salió bien - llore de felicidad de ese tipo de felicidad desbordante, ese tipo de felicidad inminente, tan grande que no sabes si gritar, llorar, reír, correr, saltar. mi hermana creció bien pero los problemas comenzaron otra vez, el no cumplía sus promesas y desde que el le fue infiel yo ya no le decía papá, comenzaban los problemas y yo y mi hermana nos encerrábamos en a pieza, solo yo sabía hacerla dormir, muchas veces tuve confrontaciones con él por que la mordía o le hacia daño jugando, gritábamos y discutíamos, y al rato después se nos olvidaba o bueno a él. al tiempo después necesitábamos a alguien que cuidara de mi hermanita así que si la montaña no va a ti, pues tu ve a la montaña, nos fuimos a vivir con la madre de mi padrastro en su casa, ella la cuidaba mientras yo iba al colegio, las discusiones eran cada ver peores entre todos los miembros de la familia, pero a pesar de ello he aprendido muchas cosas, se bordar, tejer, cocinar, coser, diseño ropa, escribo, me gusta leer, tengo buenas notas, soy respetuosa, se un poco de bisutería, cerámica, pintura, dibujo, la mayoría de artes manuales, en cambio en el área física no soy la mejor pero al menos soy lo suficientemente buena y me gusta intentarlo y divertirme en grupo, muchos de los profesores tienen buenas opiniones respecto a mi, ya tengo 15 años y se esta repitiendo la historia, mi padrastro se ha ido a trabajar lejos y es probable, demasiado probable que tenga a alguien más, quizás mi madre tenga que hacer lo mismo de nuevo ya que mi hermanita va a cumplir los 4 años, y me pregunto ¿Por qué mi hermana tiene que sufrir lo mismo que yo?, no lo mencione pero llore, mucho no tienes idea de cuanto, no tiene idea de cuantas veces me pregunte que fue lo que hicimos mal como para que ni siquiera quisiera mantener un contacto, yo amo a mi padre y me duele demasiado saber que el no siente lo mismo y me duele saber que se perdió 13 años de mi vida por maraquear lejos de la ciudad, así sin mas se desprendió de sus 3 hijos y de su familia, para ir a mantener y mostrarle amor a hijos ajenos, cosa que no me molesta, lo que me molesta es que no me dio el cariño que debía y se lo dio a alguien más, solo quería cariño, ese cariño que encontré en terceros, en mi madre que hizo doble rol, en mis amigos como un apoyo incondicional y en mi novio que nunca me a dejado sola y me demuestra el cariño que mi resentido corazón necesita, esta es la corta historia en la cual hay muchas cosas felices en las cuales el no formo parte como mi graduación y seguramente no formara parte de otros momentos importantes, como mi matrimonio en el cual caminare sola hacia el altar, o mi maternidad en la cual tendré el apoyo incondicional de mi madre y ahora lo pienso y digo ¿quien lo necesita? intentando engañarme pero no puedo, por que se que a pesar de que no quiero quererlo, lo amo y a pesar que quiero odiarlo, me gustaría que hubiese estado conmigo, me hubiese gustado que compartiera los momentos felices conmigo y ahora mi sonrisa la ven todos menos tu.

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