Capitulo 1

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-Hola mamá- salude a mi mamá mientras bajaba las escaleras

-Hola Karla- respondió en un tono seco y frio

Estaba bajando las escaleras cuando choco con mi hermano y hace que me resbale de las escaleras y caiga hasta el primer piso.

-Aggh!!!- Grite de dolor. 

-Karla!!- Grito mi hermano asustado, bajando las escaleras rápidamente.

-Estas bien?- dijo en un tono desesperado -te duele algo?- dijo el ayudándome a levantarme de el suelo.

-No, mírame estoy saltando de felicidad- dije en un tono sarcástico, pero claramente el no lo noto.

-Hay que bueno que estas bien me habi- lo interrumpí para poder hablar

-Es obvio que si me duele algo niño genio- dije mientras me detenía de un mueble.

-Deja hablarle a mamá- dijo el dirigiéndose a el cuarto de mi madre.

-No, no la llames- Le intente gritar pero sonó mas como un susurro, y no me escucho. 

Mi mama y yo no nos llevamos muy bien, mejor dicho ella me odia, pero ama a mi hermano, todo el tiempo es Joshua, y eso me hace sentir demasiado mal.

Escucho pasos y quejidos de el cuarto de arriba, por lo que ya se es mi mama quejándose por que no quiere ir a verme, y si, aquí comienza el sermón de mi mamá.

-Joshua, no me importa lo que le haya pasado a tu hermana, déjame descansar- dijo ella en un quejido, claramente le importaba un carajo lo que me pasara.

-Pero mamá, se cayo de el decimo escalón, y aparte le duele la espalda- respondió Joshua preocupado.

Amo a mi hermano, es como un padre para mi, el hace casi todo lo de la casa, hace de comer, limpia la casa, limpia su cuarto, pero a veces me cae bastante mal.

-Ahora que te paso Karla- dijo mi madre mientras me examinaba con una mirada de desagrado.

-Iba bajando las escaleras cuando Joshua choco conmigo e hizo que resbalara- dije con la cabeza agachada. 

-A Joshua no le estés echando la culpa, todo es tu culpa por no fijarte por donde miras, siempre te tiene que pasar algo y le echas la culpa a tu hermano, nunca aprendes- dijo mi madre irritada de mi.

-Pero- dijo Joshua tratando de calmar la situación.

-Pero nada, tu hermana siempre te culpa de todo a ti, y tu no tienes la culpa de todo lo que le pasa a tu hermana, ahora si me disculpan voy a mi cuarto- y cuando menos lo espere mi mamá desapareció por las escaleras.

Mis ojos estaban inundados en lagrimas por las palabras que había dicho mi madre, y fue ahí que con mis pocas fuerzas me dirigí a las escaleras para subir a mi cuarto y encerrarme en el baño como acostumbraba. 



Destinados A Estar Juntos (ACTUALIZANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora