°whether you fail or fly°

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Say you'll remember

El dinero se veía por todas partes, excepto el.
Todos reían y disfrutaban del espectáculo, excepto el.
Todos estaban borrachos, excepto el.
Todos tiraban su dinero sin importar el monto, excepto el.
Todos tenían sus miradas en los lindos strippers, excepto el.
Todos miraban a Doyoung, pero el solo tenía ojos para Jungwoo.

Ya habían pasado varias horas desde que Suho y Doyoung llegaron junto a otros jefes, estos luego de unas copas ya estaban borrachos tirando billetes a todas partes, unos se habían quitado sus antifaces pero Jungwoo y sus compañeros no, era la clara orden -no pueden quitarselos-. Varios de sus compañeros empezaron a desaparecer junto a aliándos de Suho hacía los cuartos del club, Jungwoo pudo ver qué John también se unió a la fiesta, este no iba a permitir que ninguno de esos tipos tocará a su futuro esposo que aunque normalmente John lo dejaba que hiciera su trabajo sin ningún problema cuando se trataban de tratar con tipos como esos este era posesivo, conocía lo codisioso que podía llegar a ser Ten por lo cual en esta ocasión Jungwoo desde el palo de Pole Dance observo a John y Ten dirigiéndose a uno de los cuartos, aveces Jungwoo deseaba tener a alguien que lo amara pero este se sentía incapaz de que amar o que alguien lo ame, ni siquiera sabía el significado de este pero estaba ansioso de descubrirlo.

El lindo traje rojo que llevaba Jungwoo hacía resaltarlo junto a sus mallas llenas de dinero puesto por los hombres alrededor de el, bailar le hacía sentir tanta euphoria, lo sacaba de sus problemas y pensamientos, era el y la tarimas que al pasar del tiempo la volvió suya, era un chico joven, egoísta y salvaje como le decía su madre y los hombres de ese lugar.

La música a todo volumen y las manos intentando tocarlo era su sensación favorita, las luces, el sonido de las copas, no cambiaría eso por nada, Jungwoo no se acostaba con nadie aunque aveces el precio por este era tan elevado que era imposible no aceptar, era un chico mala al cual le iba bien, bailando en las mesas, haciendo tratos con demonios, luchando contra la fantasía de tener a quien lo llevaba mirado toda la noche, enganchado en la escena.

Tenía la cara de un ángel aunque solo se puediera visualizar la mitad de esta, estaba sentado con una copa en mano, vestido todo de negro, su camisa con algunos botones fuera de lugar, su pelo desordenado y su mirada la cual era fija y embriagante, como un hombre millonario.

Jungwoo no se pudo resistir más y lo hizo, posó sus ojos en aquella mirada que no lo dejaba respirar, bajo lentamente de una de las mesas y se dirigió a este viendo cómo este se incorporaba hasta quedar depie frente a Jungwoo, era como una lucha de miradas, nada más existía en ese momento y lugar, eran los dos mirándose fijamente, sus respiraciones empezar a ser mas fuertes y estaban a centímetros de distancia.

-vamonos de aquí antes de que me vuelva estupido- su voz dura y seca

Doyoung corto el intenso momento agarrándo al menor de la muñeca y llevándolo a uno de los cuartos VIP, Jungwoo había perdido todo interés en Doyoung al ver cómo se tambaleaba mientras trataba de abrir la puerta, Doyoung estaba borracho y eso a Jungwoo no le gustaba, cuando Jungwol se acercó a este pensó que es estaba en sus cinco sentidos pero no era así, la última vez que Jungwoo tuvo que lidiar con un hombre borracho casi lo deja en la cama de un hospital, sin hablar de su padre y Lucas.

El ruido sordo del portazo detrás de Jungwoo no lo hizo sobresaltar de sorpresa, lo que le hizo sentir su cuerpo arder fue las manos del mayor tomándolo de los brazos para voltearlo, aún traían sus máscaras y este no pensaba quitársela.

ramèDonde viven las historias. Descúbrelo ahora