¿?: Despierta, lograste llegar...
Esa voz impregnada en mi mente, lo primero que se me pasó es que era All for One, pero no, la calidez con la que hablaba... era imposible que fuera él.
-Izuku abrió los ojos al instante-
Izuku: ¿Dónde... estoy?
Vi mí alrededor, todo era de color blanco... al contrario que el mundo en mis memorias, un lugar oscuro y con agonía, esto no me transmitía nada.... Mis recuerdos eran borrosos, como pequeños fragmentos en un mar inmenso, pero lo más importante no saldría de mi memoria.
Izuku: Esto es... estar muerto.
De todos los miedos que tenía luego de la muerte, este era el que menos temía, no hay nada, después de la muerte no hay nada.
Un vacío interminable yacía ante mí, no había lugar al dónde mirar, esto no era un cielo, ni un infierno.
-Las heridas de Izuku habían desaparecido, la sangre y el barro esparcido por su ropa tampoco estaba-
No siento dolor... solo... no hay nada que me pueda causar dolor aquí.
-Izuku se arrodilló mirando arriba suyo-
Izuku: Esto está bien... no sé qué esperaba, ir al cielo o volver a ver a alguien, aquí no puedo dañar a nadie... ni nadie me puede hacer daño a mí. Ja... jajaja
-Reía de una manera desesperada y no pudo evitar soltar lágrimas ahora que podía darse el lujo de poder llorar sin que nadie le diga nada-
Izuku: Es suficiente... pero por qué no puedo estar en paz, esto no es la tranquilidad que buscaba.
-Si él tuviera algo con lo que cortarse el cuello y quedarse dormido por la eternidad lo tomaría, para él era mejor que esto, pero hubo algo dentro de ese espacio vacío que lo hizo cambiar-
¿?: Tardaste más de lo que pensé... fue un suplicio verte desde aquí y esperarte.
Era la misma voz que ya no me hablaba desde mi cabeza, sino que la escuchaba lejos de mí como si se acercara pero sin poder verlo.
Izuku: ¿Quién eres? ¿Dios? ¿Me vas a castigar por todo lo que hice? Si me sacarás de este lugar... no importa el castigo que sea.
A este punto me daba igual... no quería averiguar si era el Dios bondadoso que tanto hablan.
Pero no era nada parecido a una divinidad lo que me llamaba.
-Su llamado de esta persona se trasformó en una risa-
Izuku: Te estás... ¿burlando de mí?
¿?: JAJAJA no has cambiado en lo absoluto.
Era una risa que a pesar de mis recuerdos más antiguos estaban fragmentados, recuerdo haberla escuchado muchas veces...
Izuku: Espera... tú.
-Izuku se paró mientras le temblaban las piernas-
¿?: Demoraste mucho en reconocerme.
-Comenzó a correr hacia esa voz sin analizar nada, no tenía ningún lugar al cual llegar, pero sintió que si no iba en su encuentro ahora, se iba a lamentar por la eternidad-
Izuku: Donde... donde estás.
¿?: Después de tanto que pasaste, en el fondo sigues siendo el mismo niño que le gustaba ayudar en casa.
Izuku: No puedes, no puedes ser tú, tú no mereces estar aquí, deberías estar en un lugar mejor... no hiciste nada malo en vida... no es tu culpa.
¿?: Aunque vayas al infierno, yo estaré ahí, vayas donde vayas te esperaré para darte la bienvenida sin importar cuánto tardes.
-Izuku continuó corriendo sin rumbo-
No paré hasta ver un pequeño destello en medio de la nada, al acercarme la luz se hizo más grande hasta formar el perfil de una persona.
La persona con la que pasé los pocos momentos felices que tuve en vida, estaba ahí, esto no era un sueño, era la realidad, mi verdadera realidad.
-Se tiró sobre la silueta de su madre, era real, la pudo abrazar con sus propias manos, no tuvo ninguna palabra de felicidad que expresar, solo pudo decirle los arrepentimientos que tenía-
Inko: Fue difícil... ¿no es así?
Lloré tanto que estuviera en vida no me habrían alcanzado las lágrimas.
Izuku: PERDÓN PERDONAME POR DEJARTE MORIR, PENSÉ QUE ESTABA HACIENDO TODO POR TI, DE VERDAD LO SIENTO.
Inko: No te preocupes por nada... ya estás bien. No dejaré que nadie te haga sufrir otra vez.
-Su madre le secó las lágrimas con la mano consolándome-
Izuku: HICE DEMASIADO DAÑO... TANTOS MUERTOS SON MI CULPA, YO TE ARRASTRÉ HASTA AQUÍ, NO PUEDES NI DESCANSAR EN PAZ, soy un monstruo... solo... lo siento.
Inko: Yo no te veo como un monstruo.
De ella fue de quien quería escuchar decir algo como eso...
Izuku: Enserio... de verdad eres tú...
Ella me acomodó el pelo, repitiéndome que todo iba a estar bien mientras me abrazaba... esto fue mucho más de lo que pude haber imaginado, lo dije miles de veces pero no me cansaré de repetirlo, mientras este con ella, nada más importa.
Inko: Volvamos a casa, hijo.
FIN
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Pdta: Nunca me había tardado tanto, perdón la demora por última vez, entre exámenes problemas de salud y ahora que me encuentro de viaje recién estos dos días tuve tiempo libre. Y también disculpas por el final que siento que fue apresurado de alguna manera, la verdad no tengo ni idea de cómo llevo desde Noviembre del año pasado con esta historia. Bueno solo gracias a las personas que la leyeron xd es la primera historia que escribo en mi vida
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¿Héroes dónde están?
Science FictionDespués de una larga vida sin particularidad dónde los demás lo despreciaban, llegó la gota que rebalsó el vaso en su vida, donde piensa que ya no vale nada,pero siempre hay alguien dispuesto a darte la mano.