Cronicas de la soledad

El mejor de los peores dias.

[Pensamiento]

[Corria el año 2160,  70 años despues del comienzo de la guerra de 2090, nacia yo

saker.  

apenas y durante mi infancia, viviamos en una vieja casa abandonada. en medio de la nada, mama siempre contaba como papa se sacrifico por salvarnos a nosotros dos, la historia de como quedamos ambos a la deriva del peligro y la soledad. la historia de su relacion desde que eran jovenes y de como de su amor habia florecido otra vida. como desde pequeño me enseño a defenderme y sobrevivir en la hostilidad de un mundo destruido completamente, evadiendo peligros y conviviendo con el silencio.

- la radiacion en la superficie habia afectado a mama, que le provoco varias enfermedades intratables para ese momento de la historia, no teniamos un hospital ni a quien para que pudieran ayudarla, ella solo se fue por su parte antes de morir, dejandome solo con la poca experiencia que tenia para sobrevivir en un mundo roto. viviamos en una zona alejada de la ciudad, libre de otras personas o grupos. coexistiamos gracias a una vieja plantacion abandonada en lo profundo del bosque y asi, por varios años.]

Un fuerte sonido me desperto. ahora estaba en el medio de la nada recordando aquellas cosas. tenia un golpe en la cabeza que palpitaba sangre de manera tranquila, mi mente no lograba asimilar lo que habia sucedido. ¿por que estaba alli de nuevo?, solia sucederme que me perdia en mis propios pensamientos, en una profundidad impensada y terminaba en lugares reconditos despues de divagar por horas. 

-Mierd..- habia caido desde una gran roca resbaladiza, luego de distraerme pensando.

-otra vez..- gruñi entre dientes mientras llevaba la palma de mi mano a mi cabeza. Intente levantarme entre tambaleos y algunas ramas junto con lodo que me dificultaban el paso, llevaba mucho tiempo explorando el bosque en busca de comida y el cansancio dominaba mi cuerpo casi por completo. La noche empezaba a cubrir la copa de los arboles, y las estrellas  dibujaban en el cielo la danza perfecta, como luces flameantes. tape la herida de mi frente apenas pude recobrar el equilibrio, no era la primera y tampoco la ultima vez que sucederia, siendo tan despitado seguramente pasaria de nuevo. Use las pocas vendas que ya me quedaban, las habia encontrado en una vieja mochila de un desafortunado sobreviviente como yo hace tiempo. Tal vez lo habia olvidado o simplemente fue devorado por las ''Bestias''. Tal cual sea el caso, no podia detenerme ahora, debia seguir a como de lugar, tal vez si encontraba algunas bayas del bosque me salvaria por una noche mas.

camine lo que restaba de la penumbra, encontre un buen lugar bajo los arboles frondosos y descanse el tiempo necesario para volver a la rutina el dia siguiente. la noche paso mas rapido de lo que pensaba, los primeros ruidos del dia eran los insectos que a duras penas sobrevivian en zonas como esta. la radiacion no era tanta como para matar a un ser humano, pero producia ciertos malestares de los cuales yo era testigo directo. no tenia un rumbo fijo, un lugar a donde ir. solamente seguia hacia donde queria en busca de comida, mientras que los delirios eran constantes y las alucinaciones terminaban por llevarme a lugares inhóspitos. muchas veces me habia despertado en medio de el amanecer por la esperanza de encontrar a alguien cuando abriese los ojos, llevaba un par de años sin escuchar la voz de ninguno otro ser inteligente y me estaba volviendo loco. 

[Recuerdo]

[-despierta.- mi cuerpo de un golpe se movio hacia delante, despertandome por segunda vez en la noche, una gota de sudor y mi pecho agitado me alertaban, ¿estaba pasando de nuevo?, desde que mama se habia ido sin si quiera despedirse oia su voz en las noches, en mis sueños y en mis profundos pensamientos. la unica y gran persona que me habia instruido y formado, no se habia tomado el tiempo de decir si quiera un Adios. pero no podia culparla, suponia que su corazon de madre no podria ver el rostro destrozado de su hijo en tristeza. tampoco podria haberlo aceptado a la primera, solo se fue. estaba consciente de que tenia ciertas enfermedades incurables para estos tiempos.. si solo hubiera pasado mas tiempo conmigo..]

[presente] 

-Estupidos sueños- Gruñi entre dientes nuevamente. -Por que solo no me dejan dormir- Habia adoptado la mania de hablar conmigo en voz alta. tal vez de esa manera lograba estabilizar mi mente en los margenes. tapaba mis oidos mientras fruncia el ceño, realmente era molesto para mi.

una brisa helada junto con el indómito rugir del viento en las hojas de los arboles perturbaba mi descanso, lo que era normal ya que se acercaban las visperas del invierno. era el momento exacto para buscar un refugio, pero. ¿a donde iria?, ciertamente estaba mas que perdido, no tenia la voluntad para seguir adelante, no despues de tanto tiempo en soledad. me sente encima de un tronco cercano mientras sacaba mi vieja libreta de mi bolsillo.

una gruesa tapa roja de carton protegian mis escritos, junto con una pluma de color negro, habia plasmado mis memorias y otras cosas en esas finas hojas blancas. tal vez, para que el mundo un dia sepa que existi en este planeta, o era por que aun tenia la esperanza de que el mundo mejorara en un futuro, que mas da. tal vez esta era la maldicion de la soledad. ser olvidado. 

[Nota escrita]

-No habia conocido a nadie mas, no me habia cruzado jamas con otros humanos que no fueran mis padres. pero aun asi tengo la esperanza de un dia sofocar esta emocion incesante..-

[Fin Capitulo 1]