Rivales || Michaeng

Capítulo 33

Durante todo el mes de vez en cuando Chaeyoung había visitado a Dahyun. Desgraciadamente cada vez que lo hacía Mina había salido con sus amigos o estaba en un entrenamiento de animadoras.

Para Chaeyoung era triste, ya que casi no hablaba con ella en la escuela. Sólo compartían miradas secretas y eso a Chaeyoung no le era mucho. Aún, a veces, podía sentir los labios de la castaña sobre los suyos y comenzaba a saborear la piel tibia y dulce de los labios de Mina.

La quería volver a besar. Lo único positivo fue que ya era muy amiga de Sakura y ni hablar de su pequeña novia dragón. Aún no se había encontrado con los padres de la castaña, pero esperaba no hacerlo tan pronto, ya que se sentiría nerviosa hablando con ellos mientras pensaba en su hija.

—¿Chae, me escuchas? —preguntó Tzuyu junto a ella.

Estaban en el patio de la escuela mirando como unos chicos de primero jugaban con un balón de fútbol.

—Sí —respondió un poco triste, no había visto en todo el día a Mina y eso le bajaba los ánimos.

—Pronto vendrá, descuida —dijo su amiga, más feliz de lo normal.

Chaeyoung apremió a Sana que, a pesar de ser una idiota, había visto cómo ayer se había llevado a Tzuyu a las duchas. Duraron allí un rato y al volver su amiga había regresado con el cabello revuelto y las mejillas sonrojadas.

Chaeyoung la había estado molestando todo el día hasta tal punto de recibir una patada de Tzuyu para hacerla callar.

De lejos vio a Mina hablando con unas amigas y decidió que la necesidad de hablarle era muy alta. Se cubrió las manos en las mangas de su chamarra y fue hasta ella, excusándose con Tzuyu.

No parecía muy triste, ya que apenas Chaeyoung se fue una chica de ojos miel llegó hasta ella y comenzó a hablarle muy de cerca. Sana era una pilluela.

Estaba a pocos pasos de la castaña cuando sintió como alguien chocaba su hombro.

—¡Miren, es la rarita! —dijo Bambam, animado, aunque no había nadie con él y llevaba su chaqueta de fútbol.

—Bambam, hoy no estoy de ánimos. He estado lejos de tu novia, así que déjame —intentó apartarse de él, cuando le rodeó los hombros con el brazo.

—¿Pero no estabas yendo a verla ahorita mismo? —preguntó. Chaeyoung no pudo responderle y para sorpresa del chico, asintió.

—Iba a preguntarle si hoy Sakura estaba en la casa, quería darle una sorpresa —se felicitó mentalmente por aquella gran excusa.

—¡Wow, eres una novia atenta! —dijo con una sonrisa falsa y después la sujetó con más fuerza —. Bueno, vamos los dos.

Fueron y Mina pareció sorprendida al ver a su novio rodeando el cuello de Chaeyoung con el brazo mientras la chica hacía una mueca. Se despidió de sus amigas y se acercó hasta ellos.

—¿Qué hacen? —preguntó delicadamente, mirando directamente a Chaeyoung, esta negó con la cabeza.

—Amor, venía a verte —respondió Bambam, intentando captar su atención ya que su novia miraba a Chaeyoung.

Pronto los ojos chocolate se posaron en él y sonrió seductivamente a la castaña.

—¿Y qué haces aquí, Son? —preguntó y Bambam decidió apretarla más en su agarre.

—Venía a preguntarte para hacerle una sorpresa a tu hermana ¿A que no es una novia atenta? —preguntó felizmente, pero no le agradó la mirada seria de su chica.

—Ah, ya veo —respondió Mina, fingiendo indiferencia y al final Chaeyoung se soltó de Bambam.

—¡Ya, suéltame! —replicó alejándose mientras frotaba su cuello. Bambam se encogió de hombros.