Quince

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Cuando decidió que era tiempo de que ambas hablaran le pidió a Camila para verse, la morena no puso ninguna objeción y Lauren sabía que le preguntaría acerca de sus excusas constantes a sus invitaciones. En cuanto estuvo a unos metros del gran caserío que era la residencia Cabello se lo hizo saber a Camila por medio de un mensaje. Por supuesto que fue innecesario ya que la morena la esperaba de brazos cruzados y con una mirada curiosa en la entrada de la residencia.

Lo primero que noto Lauren fueron sus piernas, siempre estaban descubiertas para que el mundo supiera lo que no podría tener, la ojiverde comprendía que ahora ella sería una más de esas personas que día a día volteaba a ver a Camila.

–Estuve veinte minutos esperando aquí afuera Lauren! – la castaña sonreía emocionada de por fin volver a ver a su amiga y amante, se acercó dejando un beso en su mejilla.

Lauren estaba nerviosa y aunque intentaba aparentar lo contrario sus mejillas rosadas y el molesto tic en su mano derecha no ayudaban en nada.

–Ven entremos, papá salió por unos días de la ciudad y Mackenzie tiene prácticas hasta tarde– cada vez que se veían en la casa de la morena tenían que ocultarse de su pequeña hermana, una niña encantadora que tenía enamorada a la ojiverde con su encanto y sus travesuras –Quieres beber algo?

–No, estoy bien gracias Camz– podría continuar diciéndole con aquel apodo al finalizar? Valia realmente la pena alejarse del placer que sentía cuando estaba con ella? No sabía de qué forma abordar la situación y decirle lo que debía decir, era tan torpe y nerviosa con esas cosas, Camila estaba apoyada en el marco de la puerta que conducía a la cocina, asintió sonriendo y caminando hacía Lauren intento besarla, pero la ojiverde giró su rostro y esto hizo enfurecer a la castaña.

–Lo sabía! ¡Qué diablos está pasando contigo Lauren! – Camila se dirigió a la cocina seguida de Lauren –Me ignoras en el instituto, cuando estamos con los chicos ni siquiera me miras, no has respondido ninguno de mis mensajes, ¡mierda! qué diablos te hice!?

No había forma de correr de aquello, pero tampoco debía hacerlo, esa conversación con Camila era necesaria si planeaba seguir con su vida y su nueva rutina, pero le aterraba de sobremanera cambiar las cosas completamente y tener que alejarse de la morena, la cual estaba enojada mirándola esperando que se dignara a responder.

–No quiero que sigamos haciendo esto.



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Softlaurenn. 

It's Not Love -ϲαмяєи-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora