34+35 / TaeLice [+18]

Capítulo 5

Entonces, todo se hizo negro.
Por alguna razón  ellas 7 estaban atadas a unas sillas.
¿Por qué?  ¿Qué había pasado la noche anterior? 
Jennie fue la primera en abrir los ojos, su mirada se posó sobre Rosé, su amiga -con derechos- e intentó despertarla, más ella no quería,su sueño era muy profundo y le impedía sentir el olor repugnante que desprendía la sala.

Jennie se movió hasta conseguir encontrarse con el cuerpo se lisa,  al solo tocarla un poco la misma despertó, grotando agudamente al sentir que estaba amarrada, seguido de un expresión de asco debido al olor que desprendían los cuerpos de las ratas muertas a los costados.

Jennie se encargó de levantar a todas las demás,  cada una dió un grito, jennie sentía la creciente necesidades de asesinarla por gritonas, pero estaba amarrada y asustada al saber que estaban en peligro.

-Si no dejan de gritar, seré  yo quién las asesine.

Afirmó Yeeun después de poder safarse de las cuerdas, sus  manos eran eficientes, así  que no le fue difícil lograrlo.

- ¡Que Buenas manos! - Nayeon dijo mientras sonreía,  todas entendieron  instantáneamente.

-No es momento para los chistes sexuales- Dijo Dahyun, mirando a Nayeon con una pequeña mueca de disgusto.

-Cierto.- Yeeun dijo mientras desataba a Jennie, misma que desató  a Lisa y entre las tres desataron a todas las demás,  Jisoo antes de cualquier cosa se acercó a los cuerpos de las ratas.

Las examinó  por un momento y luego con sus manos comenzó a despedazarlas, llenando sus manos de sangre y algunos restos de rata regados por aquí  y por allá.

-¿¡Qué carajos haces?! - Preguntó Rosé, viendo como Jisoo movía los cuerpos con sus manos.

-Señorita mafia, ¿Lo olvidaste? - Preguntó  Lisa a Rosé, mientras miraban como Jisoo lograba sacar cada una de las pequeñas cámaras.

-Hijos de puta Básicos- Soltó  Jisoo cuando dejo las cámaras en la mesita en la que estaban sentadas.

Y entonces, la aparición de la mañana...Kim Namjoon.

-Muy buenos días, Señoritas. - Dijo mientras entraba a la sala.

-Hijo de pu- Yeeun iba a insultarlo, pero Namjoon la interrumpió.

-¡Señorita  Jang! No puede  usar esas palabras contra la persona que será su jefe. - Namjoon habló cínico, mientras las otras chicas mantenían un rostro confundido.

-Desde ahora trabajan para nosotros. - Musitó - No pueden usar nuestras fotos, ni videos, ni nada que se le parezca,  cada vez que nosotros deseemos que ustedes destruyan la reputación  de una persona deben hacerlo sin cuestionar y claro..-Namjoon  se pasó su dedo pulgar por su labio inferior - Tendrán un pago, pero cada vez que hagan algo mal obtendrán un castigo.  - entonces, ellas comenzaron a entender todo- Su trabajo será  única y exclusivamente nuestro igual que sus cuerpos, no pueden hacer nada sin permiso, a expecion  de que sea entre ustedes.
Si está  claro, dejaré que el señor Seokjin pase. - Namjoon  caminó recto hacia la puerta, e iba a retirarse, pero se dio la vuelta llegando hacia Yeeun, plantando un beso en la mejilla de ella.

Parecía un gesto dulce, pero lo que ella no sabia era que ahora estaba marcada.
Tal como judas a Jesús.
Namjoon  marcó a Yeeun con un beso,