¿Hormonas que liberamos cuando vemos a la persona que nos gusta?
Pues yo no lo creo, es algo más, algo que te hace querer estar vivo.
Dos personas, dos corazones y un sentimiento que los une completamente.
¿Qué se sentirá nunca haber amado? Pues Mikaela Tepes la prueba de ello, tan lindo, amable, inteligente, bueno en los deportes, dulce, atentó, cualquier chica desearía un chico así. Pero Mika, en sus 16 años de vida,no sintió algo, quería sentir ese algo, por desgracia ese sentimiento jamás surgió a lo largo de su vida.
Hasta que un día de escuela como cualquier otro, un nuevo estudiante llega a la escuela de Mika.
¿Qué es esto que siento? Mi corazón late como burro sin mecate, el aire me hace falta, algo me oprime el pecho.
Esos eran los pensamientos del rubio,pero, ¿Porqué? ¿Cuál era la razón de su estado? No lo sé, tal vez puede que...
-Hola, soy Yuichiro Ichinose, es un placer conocerte- Esa voz, era simplemente perfecta. Cualquiera quedaría pregnado de tanta belleza.
Pero ¿Quién era el dueño o dueña, de esa voz tan perfecta?
-Y-yo soy...- Simplemente las palabras no salían de la boca del pelirubio. ¿Porqué? La verdad es que ni el mismo sabía el porque.