El Secreto Del Bosque....

Capitulo 1: sola... cómo siempre

Narra T/N__________

-¿Ya casi llegamos?- pregunte quitándome los audífonos

-No, todavía faltan unos kilómetros más hija, no te desesperes- Ruedo los ojos volviendo a ponerme mis audífonos y recargando mi cabeza en la ventana

Estos días han sido de los peores, termine con mi novio, saque malas notas en la escuela, todos mis amigos me traicionaron, en fin, una vida triste.

Íbamos de camino a quien sabe dónde, creo que a una cabaña, no estoy segura, mis padres me dijeron solo eso, y no, no son vacaciones, mis papás vienen por algo de unos negocios, que se yo,  lastimosamente tenía que ir porque mis papás no me tienen la suficiente confianza para dejarme en casa sola, lo cual para mí es muy absurdo porque tengo 17 años pero bueno, ya que, aquí estoy camino a ese tal lugar misterioso en el que, probablemente moriré del aburrimiento.

-¿Aún no llegamossss?- dije remarcando la s al final

-_______ por favor, deja de comportarte como una niña, y no, aún falta mucho, cierra la boca- dice mi mamá volteandome a ver desde el asiento del copiloto enojada

-No soy una niña- digo gritando - yo no quería venir a este estupido viaje, hubiera preferido quedarme en casa, ni que me fuera a drogar o algo- cruzo mis brazos mirando por la ventana

-sabemos que jamás harías eso hija pero, por favor entiende, además solo serán unos días, no toda la vida, me siento más seguro que nos acompañes- dice mi papá mirándome por el retrovisor del coche -tranquila, ¿Si?-

-suspiro y asiento con la cabeza- está bien, me callaré- cierro los ojos y vuelvo a ponerme mis audífonos mientras suena Starboy de The weekend.

Mi papá era más lindo conmigo, recuerdo que de pequeña me daba todo solo para verme feliz, aunque, se que se lo estoy recompensando con una hija irresponsable, cuando cumplí los 17 el fue el único que recordó mi cumpleaños, entro a mi habitación con un pastel muy lindo, ni siquiera mi mamá lo recordó, llore toda la noche ese día, sin duda uno de los peores días.

Mi mamá ya no sé si me quiera, desde los 10 años empezó a ser muy distante conmigo, jamás supe lo que pasó, no recuerdo el último abrazo que me dio.

Soy hija única, mis padres habían intentado tener un bebé por mucho tiempo pero, jamás volvieron a poder y perdieron completamente las esperanzas, admito que si me hacía falta un hermano a quien contarle todo, es un sueño que jamás se borrará de mi mente porque pues, como ya dije, no tenía amigos así que, mi único método de poder llevar las cosas era llorar, así de fácil.

-¿_______? Hija, hemos llegado- escucho la voz de mi papá moviéndome el brazo, al parecer me había quedado dormida lo cual me parece excelente porque ya habíamos llegado

-niña por favor, no tenemos todo tú tiempo, baja del coche rápido y saca tus maletas- suspiro pesadamente rondando los ojos saliendo del coche

-ignora a tú madre cariño, solo está de mal humor por el trabajo, no te preocupes- dice mi papá ayudándome a bajar mis maletas

-pues, si dejara de tratarme así tal vez lo intentaría- digo sacando la última maleta del coche -aunque no esté de mal humor siempre me trata así papá, ella no me quiere- lo miro cerrando la cajuela

-princesa, no digas eso- acaricia mi mejilla con su mano- ella te ama solo que, no sabe cómo demostrarlo- me dedica una linda sonrisa que solo el sabe dar y le sonrió igual

-pues, eso espero papá, aveces extraño su afecto- pongo mi mochila en mi hombro y avanzo arrastrando las maletas hacia la cabaña

-lo se hija- dice mi papá abriendo las puertas de la cabaña -¿Y que tal?- miro el lugar asombrada, para ser solo un viaje de negocios mi papá se había lucido bastante al rentar tal cabaña