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"Síntomas"

"Di 'ah' Endeva-San~." Pidió de forma dulce el alpha mientras intentaba por cuarta vez darle en la boca, tan siquiera una cucharada de el helado que tenía en su regazo.

Enji lo fulminó la mirada"¡Te juro que si no me consigues el estupido helado que quiero, te voy a golpear Hawks!." Grito el pelirojo mientras le lanzaba una mirada asesina a su pareja.

El mencionado no pudo evitar estremecerse asustado, con la idea de que si omega lo golpeara, el pensó que ese helado que ahora tenía en sus manos serviría.

Los síntomas del embarazo se habían intensificado después de la cena en la residencia Todoroki.

Keigo no podía evitar pensar que había terminado los meses de prueba en los que lo único que lo atormentaban eran los antojos de Enji. 

Ahora tenía que pelear con un omega que constantemente pasaba de feliz a molesto, a triste o a frustrado. 

A la par que presentaba bochornos, ganas de vomitar y demás. 

Era difícil tener que soportar aquello. 

Pero hawks siempre se hacía a la idea de que si ya era difícil para el, era quizás lo doble para su omega que cargaba con su cachorro. 

Su sufrimiento no era igual.

Por otro lado incluso era curioso el ver el aspecto de Enji.

Aún mantenía ese porte increbantable e serio, pero ahora a eso se le sumaban cambios físicos más que obvios, su vientre de a poco se notaba más y más en su ropa, al igual de que sus pectorales ahora eran más grandes y abultados. 

Lo que quería decir que su cuerpo ya estaba produciendo leche para si cachorro. 

Y hasta cierto punto Hawks podría asegurar que Enji se había hecho un tanto más pequeño. Antes de saber lo que vivió Endeavor, Keigo siempre se preguntó el porque el pelirojo iba contra los estándares de omegas "convencionales."

Pequeños.
Con porte fino. 
Cintura pequeña.
Piernas largas y demás. 

Endeavor era más un alpha. 

"Como Teka le ordeno ser."

"Ya está En-Chan, se que lo quieres, pero no puedo dejarte solo." Anuncio el rubio mientras se intentaba alejar lo más que podía de su omega, puesto que había tomado un cojín que posiblemente le lanzaría, y después le ordenaría regresarlo. 

"Llama a alguien, yo quiero ese estupido helado."

Y hawks suspiro. 

Saco su teléfono y marco. 

...

"Ya estoy aquí." Anuncio la chica mientras dejaba sus cosas en la mesa, después de su anuncio un hawks que contaba con el cabello hecho gironés, ojeras espantosas bajo sus ojos color miel e incluso sin una que otra pluma en sus enormes alas apareció frente a Fuyumi, ella se preocupó. 

Si le preguntaban el que se veía más afectado físicamente por el desgaste era Hawks, incluso si le preguntaban ella podría asegurar que Hawks era el omega. 

𝙋𝙪𝙥𝙥𝙮 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora