Dulce Tentacion (I libro) [Terminada]

~capitulo 5~

~No romperemos nada~

Narra Rasher

Estaba picado de curiosidad por esa singular humana, no entendía aun porque era inmune a nosotros pero me negaba a sucumbir ante esa curiosidad tan absurda y banal

Llegamos a la casa donde mis hermanos y yo nos quedamos, apenas estacione Rusther bajo de el auto corriendo con su velocidad sobrenatural a ella y saltando al balcon de su habitacion adentrándose a su cuarto sin decir absolutamente nada

Agradeci nuevamente estar en una zona privada, sin casas alrededor; por eso podíamos actuar asi sin problemas a ser descubiertos o causar alarma entre los humanos. Me felicitaba a mi mismo otra vez por haber vendido aquel lujoso pent-house donde estabamos rodeados de humanos todo el tiempo y nos hice mudar aca, al principio mis hermanos se quejaron y renegaron pero luego quedaron satisfechos ante la elección que tome

Cada uno entro a la casa para mientras caia la noche y nos íbamos a cazar, para estar sin problemas el dia de mañana; me dirijo a mi cuarto para tratar de despejar mi mente, esa humana es como un extraño y unico imán... Pero aqui, ella es el imán y yo el metal, no como se supone debe ser con todos a nuestro al rededor, nosotros el imán y ellos el metal que son arrastrados hacia nosotros sin poder poner resistencia alguna

Entro a mi habitacion y cierro la puerta, me dirijo a mi mesa de noche para tratar de dibujar algo y no pensar en ella; me siento frente la mesa y  acomodo mis cosas para empezar a dibujar pero creo que no funciona por que lo unico que queda plasmado luego de un rato en el lienzo blanco es la imagen de ella

Maldición...- tiro el libro con el dibujo en el escritorio y me levanto de ahi para ir al balcon a mirar el cielo a ver las estrellas, habia una extraña luna menguante imponente en el cielo; solo estaba ella en  aquel manto oscuro, no habia ninguna estrella

La noche es maravillosa y los arboles al rededor de la casa se mueven con el compas del viento tranquilo, el canto de los búhos y las aves nocturnas se escuchan a lo lejos, cierro los ojos y me apoyo en el barandal del balcón para agudizar mi oido y escuchar mejor los sonidos del bosque sintiéndome un poco tranquilo de esa manera

Escucho ramas romperse, gruñidos bajos y un aullido que hace que las pocas aves despiertas a esta hora salgan del bosque lejos de los arboles, un aroma a perro mojado llena mis fosas nasales haciendome suspirar un poco, cinco lobos se detienen frente la casa, volteo levemente mi cabeza al estar de espalda y los veo

La loba del colegio, la chica amiga de ella esta liderando aquel extraño grupo que ha invadido nuestro territorio, es la alpha de la manada cerca de aqui... 

Frunzo el ceño al verla junto con su beta, dos guerreros y una bruja; supongo que para evitar sucumba ante nuestra esencia, me quedo en mi lugar y ella se des-transforma quedando en un short y un top negro frente a la casa mirándome directamente a mi, sus ojos dorados fulminándome sin piedad ni remordimiento dejandome muy claras sus intenciones de querer asesinarme, mientras yo permanezco igual sin inmutarme ni un poquito con ella detras mio asesinándome en pensamiento

¡Salgan ahora, los cuatros!- gruño alto sin dejar de fulminarme con la mirada, ruedo los ojos y me lanzo desde el balcón aburrido de esto, además de que tenia cierta flojera de salir por la puerta para dar todo un recorrido que al final me llevaría al mismo lugar

¿Cuál es el drama, perrita?- dijo Randi colocandoce a mi lado apoyando su brazo en mi hombro con total desagrado mirando a los licántropos frente nosotros, me cruce de brazos mirando sin expresion a los entes frente a mi