Capítulo dos

17 2 0
                                    

Dedicado a una de mis sobrinas y amigas 🥰
Lizeth Flores Arciniega ✨

Ivette:

No puedo creer que te quedarás dormida —dije mientras trataba de manejar más rápido y llegar antes de las 8 al Colegio, son 2 años de colegio antes de la universidad, entramos a los 20 a la Uni, en lo que estaba, Scarlett no me hizo caso— ¡te dije que dejarás de comerte la cabeza con eso!

¡Lo intenté lo juro! —dice mientras termina de cepillarse el cabello, si, en el coche— pero cada vez que cerraba los ojos volvía a ver ese libro, no entiendo porque.

Te lo dije, seguramente lo tenías de pequeña y ya, olvida el tema, ya llegamos —estacionó el coche y espero a que baje Scarlett— por suerte tenemos las mismas clases.

Así es, faltan 5 minutos ¡vamos date prisa! —dijo comenzando a correr al salón de química—

¿Química a primera hora, Que loco hizo los horarios? —me quejó corriendo detrás de ella—

Ouch, yo me preocuparía por otra cosa ahora mismo —se detiene—

¿De qué hablas? —si, aveces me confunde—

De que ahí viene tú admirador —apunta hacia un chico que venía corriendo hacia nosotras—

Ay no, no ahora —me quejó—

Hola Russell, y holaaa bombón —y ese es Diego, el chico que a intentado algo contigo desde hace 2 años, trata de poner cara coqueta pero en realidad parece el lobo de la película de Caperucita—

Aléjate —le digo mientras tomo a Scarlett del brazo y la jalo hacia el salón— creí que en el colegio me libraría de ese tipo —le digo a Scarlett—

Te escuché, tan linda como siempre —dice siguiéndonos— en fin solo venía a decirte que acaban de anunciar que el profesor llegará tarde y no podrá dar la clase, tenemos las primeras 3 horas libres, ¿quieres hacer algo? —de nuevo la cara del lobo loco ese—

No lo creó, ahora aléjate —nos vamos de ahí de nuevo al estacionamiento y se que Scar quiere reír— atrévete a reír y te vas a casa caminando Russell —subo al coche—

Uy perdón pues —dice y voltea a verme— hoy es el día, ¿y si aprovechamos las horas libres y vamos de una vez? —

Sube al auto —ella entra y yo manejo hasta salir del estacionamiento—

Para en una florería, me bajo yo a comprar unas flores —dice buscando algo en su mochila, probablemente su termo con café—

Sigo conduciendo hasta llegar a una florería de paso, Scar baja y vuelve con un ramo de rosas blancas y una roja en medio, el color favorito de Enzo, sube y continuamos de nuevo hacia el cementerio a ver a nuestro amigo, al llegar entramos y vamos a su tumba, ninguna habla pero estoy segura que también ella está recordando momentos que pasamos con el.

Scarlett:

Ninguna habla y es lo mejor, cada una esta en sus pensamientos, acomodo el ramo en la tumba nos quedamos así por poco más de 1 hora.

Falta 1 hora para la siguiente clase, deberíamos ir yendo —le digo—

Si, ya vámonos o llegaremos tarde a física —dice mientras comienza a caminar a la salida y sube a su coche conmigo siguiéndola—

Enserio, ¡¿que loco hace los horarios?! —se queja de nuevo—

No lo sé Belova, vamos ya o llegaremos tarde —le contesto—

Llegamos al colegio y continuamos con nuestras clases, al salir de la última creíamos que al final no había sido un día tan malo, o bueno, eso creíamos.

Ivette y Scarlett, esperen —nos dicen—

¿Que hace ella aquí? —pregunta Ivette en susurro—

Estuve esperando a que salieran, sabía que estarían aquí —nos mira sonriendo, solo ella se cree esa sonrisa—

¿Que necesita señora Teller? —le pregunto—

¿Teller? Cariño mi apellido es Knight —de nuevo esa sonrisa falsa—

Dejo de ser Knight cuando se divorció del señor Alezandro por irse con otro hombre, ¡hasta se olvidó de su hijo! —le contesta Ivette y Carmen borro su sonrisa—

Como sea, hoy es un día especial para ustedes y sé que van a ir a verlo a su tumba, así que apúrense, necesito ir y sabes dónde está —nos dice—

Si hubiera ido al velorio de su hijo lo sabría señora, y ya fuimos por la mañana, llego tarde —le contestó—

Ni de broma —se enoja— ustedes me van a llevar y ya porque yo lo digo, necesito sacar algo de Alezandro —se le salió pero parece que no se dio cuenta por el enojo— apúrense no tengo su tiempo —nos toma a cada una de un brazo y trata de jalarnos—

Aleja tus sucias manos de mis chicas —¿mamá? ¿Qué hace aquí?— suéltalas y lárgate de aquí Carmen.

Pero mira que tenemos aquí, Russell que gusto verte, que bien te ha tratado la vida —mira a mi mamá de arriba a abajo—

Quisiera decir lo mismo de ti pero para mi no es ningún gusto verte y parece no irte bien —mamá ni siquiera la mira— ¡Hola cariño! Aaa Ivette tú mamá está en mi auto, suban las 2 al tuyo y nos siguen vale, adiós Carmen. — se va hacia su auto—

Adiós señora Teller —decimos ambas y nos vamos al auto de Ivette—

¡Si te vuelvo a ver cerca de mi hija te las verás! —escuchamos que dice la mamá de Ivette sacando medio cuerpo por la ventana del auto—

Adoro a tú mamá —le digo a Ivette—

Y yo a la tuya —me responde—

Se escucha que timbra un celular y es el de Ivette.

Hola cariño, ¿recuerdas la cabaña de los Russell? La que está en el bosque, donde íbamos en vacaciones a acampar, prepárense porque iremos el fin de semana, pero ahora sigue el auto de Anne, iremos a comer todos juntos a casa de la abuela de Enzo, tú papá y Raphael ya están ahí, también tú hermano y la de Scarlett, nos vemos ahí. —cuelga—

Pues a casa de la abuela Knight se ha dicho —digo mirando a Ivette—

Que querría la señora Carmen... —dice sin dejar de mirar la carretera—

No tengo idea, deberíamos decirle a la señora Knight lo que dijo —le contesto— ¿que querrá del señor Alezandro?

Vamos a tratar de averiguarlo.  —responde—

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 30, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

No me olvidesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora