》FUCK BOY《

CeLoS

Después de batallar contra Sarvente

Recientemente terminada la batalla, Sarvente se reincorporó en sí después de haber dado su máximo esfuerzo y más poderosa y única transformación demoníaca. Medio exhausta, sorprendida de tal maravilla potencia y voz única escuchada por sus oidos. Y no era la única.

A Ruv se le tornaron las mejillas de color rojas del enojo, su ira era capaz de sentirse a kilómetros, pero sobre todo, estaba sorprendido de escuchar a el de pantalones naranjas contra su amiga que en este momento ya era un demonio.
No podía articular palabra, qué podía decir?

Sarvente fue cayendo lentamente hacía el frío suelo de esa iglesia.

-Cómo...?- se preguntó la stick esta vez demonio cuando los sonidos de sus oscuros zapatos se hizo presente en todos los rincones de su iglesia- como fue posible...otra vez...?-dijo Sarvente tratando de contenerse algunas lágrimas mientras se achicaba abrazándose a sí misma. Tan pronto como dejo notar esa acción su mejor amigo de confianza fue a socorrerla y a quitarle las lágrimas que velozmente mojaron las mejillas de la chica con cara de helado napolitano. Pues Sarvente se sentía miserable, ya era la segunda vez que la dejaban en ridículo haciéndola parecer devil, eso bastaba para hacerla sentir terrible-.

Mientras el vencedor:Whitty no entendía porqué la alegre y parlanchina monjita que conoció ace unos momentos, que ahora era un demonio que podía volar con un aire amenazante, ahora dejaba caer lágrimas de su propia decepción en ella. De algún modo lo hizo sentirse algo incómodo y culpable a la vez, la peor combinación de sentimientos que podía existir dentro de el. Tampoco era capaz de articular palabra, sinceramente iría, aunque no es para nada bueno consolando a personas, a tratar de consolar a Sarvente, pues era buena persona y hasta ahora sigue sin personas en su grande iglesia que la sigan y la aprecien por tal maravillosa persona que era.

Ruv se sentía peor que su amiga de confianza, si Sarvente no pudo, el ni siquiera lo podria sobrepasar...pero...quien era VERDADERAMENTE aquel sujeto hibrido? No cualquiera era capaz de tener tan potente voz tan fuerte como la de el y tan rapida como Sarvente en su lado demonio.

El ruso soltó a su amiga, esta no entendía que iba a hacer pero sabía que no sería nada bueno a lo que trató de seguirlo a su ritmo tratando de detener su paso para que no cometiera ningún acto de violencia contra Whitty.

-Ruv! Espera por favor!- dijo Sarvente corriendo tras el de gorro ruso que iva a paso firme contra el hibrido de campera azul-.

Whitty se había acercado un poco para saber como estaba la estick demonio cuando se le acercó el de tonos turquesa. Se apartó un poco por la acción de Ruv pero no retrocedió, creyó que recibiría algún golpe y groto, o algo así,pero solo recibió una pregunta por parte del ruso:- ¿Quién eres o quién fuiste?- escuchó con mucha atención las palabras de Ruv.

ESO NO TE DEBE DE IMPORTAR...

Simplemente era un tema que le costaba superar...su pasado...
Por eso reaccionó de esa manera, diciendo esas palabras con un tono más frío que el de Ruv, una mirada que podría comerte el alma en segundos.

La monja estaba aterrada a pesar de que estaba a más sentimetros que el ruso. Este estaba casi en shock. Nunca vio tal mirada.

Ya sierto tiempo habría pasado para que el ex-estrella de rock se retirara. Prometiendo no haber visto nada en aquella iglesia y que tampoco diría nada del tema, además, casi nadie le preguntaba nada.

Los stick decidieron olvidarlo, por el momento, ninguno volvió a nombrar su nombre el resto del día y, quien sabe, el resto de la semana. Pero por dentro lo recordaban.