La Fortaleza de Fuego (EN EDICION)

Parte sin título 3

Esta ciudad usa los diferentes tipos de combustible como cualquier otro lugar. La unica diferencia es que nosotros nos encontramos en donde antes era una mina de un mineral que era muy extraño. Un mineral liquido que con la tegnologia de ahora se usa como electricidad. Al pasear por las calles puedes ver en el suelo tubos con un liquido espeso brillante color naranjoso. Tiene varios usos, como para alumbrar el camino hasta de servir como puerta para solo unos pocos tipos de tren. Que tienen este mineral en su capa exterior que permite que pueda entrar por la aparente pared de roca.

Este material es tan importante, que las unicas formas solidas que se han hallado de este mineral son parte de la corona de la autoridad. Se dice que tambien le da habilidades magicas a quien lo posea.. pero esos son rolo rumores.

- Y eso seria basicamente la respuesta no tan larga...-. Decia aquel vendedor sonriendo mientras el joven de cabello oscuro le miraba con mucha atención.

-Ya veo! Eso esimpresionante, debo revizar mas las notas de los trenes y susciudades jeje, en fin muchas gracias..- Decia bajando la cabeza agradecido pero el vendedor le muestra su mano y este se extrañaba un poco de tal accion.

-.. Agradeceme comprandomealgo quieres?-. Decia el vendedor riendo un poco y luego mostrando su gran variedad de dulces.

-Ja! Por supuesto... Me llevare un poco de todo.-

Es asi que el joven con unabolsa de dulces en mano, sale de la estación de tren. Miraba la gran ciudad hasta que sus ojos notaban un carro negro aparcado, con dos grandes criaturas peludas; de ojos cerrados y largas orejas, que en sus patas habia un cartel con su nombre.
Algo inseguro se acerca saludandoles, pero estos solo le miraban en silencio y abrian la puerta para que el entrara. En sus largas capas negras estaba la insignia de la Casa Real, por lo que entraba al auto.

Unos cuantos minutos despues de viaje, llegaban al gran castillo, que estaba decorado habia mucha gente haciendo sus tareas.Las personas que miraba el joven se veia ocupada yemocionada. Todos estaban trabajando para el evento.

Los guardias por un lado, seguian escoltando al joven de cabello oscuro, llevandolo a una sala alejada del tumulto de gente; era bastante elegante y bien amueblada, con una gran ventana a lo que parecía ser un jardín. El joven se sentaba en uno de los sillones color carmesí y se dispone a esperar.

Y asi quedaba, habia un silencio. Pensando que estaba ya solo, sacaba un dulce para degustarlo. No era nada del otro mundo, pero estaba delicioso.

- Saludos, joven Montterosa. El viaje fue placentero...?-. Decia una voz suave y algo grave, tomando por sorpresa a nuestro protagonista, quien se giraba de su asiento para ver a aquel sujeto.