Cuidando a la Pequeña Emperatriz [ FINALIZADA]

✨ Capitulo 1 ✨

Era una tarde tranquila, todos los discípulos de encontraban haciendo sus deberes, unos estaban entrenando con la espada, otros simplemente estaban leyendo o caminando mientras hablaban sobre el muchacho que había cautivado el corazón del jade menor.

El invierno se encontraba más cerca de lo esperado por lo que decidieron comenzar a prepararse para este.

La mañana parecía muy agradable, todos estaban felices o eso creían hasta que vieron entrar a una mujer de otra secta junto a los ancianos de esta. Cómo siempre la curiosidad reinaba en los corazones de ellos y sin más se dispusieron a escuchar en secreto la conversación que había y vaya que no debieron hacerlo ya que lo que los escucho los dejo completamente sorprendidos.

X: Bien Wangji tu y la joven MianMian se casarán en un mes -dijo uno de los ancianos-

Hanguang-jun: Comprendo -mirandola-

MianMian: Gracias por su aprobación -sonriendo-

Todos estaban en completo silencio y sin que nadie se dieran cuenta continuaron con sus deberes como si no hubieran escuchado aquella conversación, pero lo que más les importaba era el como le iban a dar esa noticia al joven el cual todos ellos consideraban una madre y hermano el cual siempre había dado todo por su secta e incluso el sacrificarse para que no los castigarán. Todos estaban tan decepcionados y enojados ante lo que escucharon que decidieron que los más confiables debían decir esa noticia, así que mandaron a Lan Sizhui y a Lan Jingyi.

Wei Wuxian un joven doncel de unos 18 años, de piel blanca como la leche, unos bellos ojos de color gris, de una bella figura y una sonrisa que enamoraría a cualquiera. Se encontraba alimentando a los conejos que tenía, estaba tan feliz porque hace apenas unas horas se había enterado de que estaba embarazado, apenas tenía 3 semanas. La noticia lo hizo la persona más feliz del mundo, ahora estaba pensando en una manera de decirle a su esposo está gran noticia, vagaba en su mente la idea de que iba a tener una familia con la persona que más amaba, hasta que algo lo hizo volver a la realidad.

X: ¿Te enteras de que Hanguang-jun se va a casar?

X: ¿No ya estaba casado con el señor Wei?

X: Lo estaba, escuché a unos discípulos decir que los ancianos le encontraron pareja al jade menor -caminando-

X: ¿Cómo está eso?

X: Según dicen que como el señor Wei es hombre no puede dar a luz a los hijos de Hanguang-jun por eso lo persuadieron para que esté se case con una chica del clan Lanling Jin

X: Pobre señor Wei, esto lo va a destrozar

X: Lo se -soltando un suspiro- Para colmo Hanguang-jun no se opuso a nada y acepto sin decir más

X: Si pudiéramos hacer algo por el señor Wei

Wei Ying: Claro que pueden -dijo saliendo de su escondite-

X: Señor Wei -dijeron ambos al unisonido y dando una reverencia-

Wei Ying: No hagan eso A-Yuan y A-Ji -sonriendo-

Sizhui: ¿Escucho lo que dijimos? -preocupado-

Wei Ying: Si y tienen razón -sonriendo-

Jingyi: ¿Sobre qué?

Wei Ying: De que Lan Zhan se va a casar -con el corazón roto-

Sizhui: No era nuestra intención chismear así

Wei Ying: No te preocupes A-Yuan, ya que eres igual a mi -sonriendo-

Sizhui: Si mamá -se sonrojo al decir eso para después cubrir su boca con sus manos-

Wei Ying: ¿Puedes decirlo de nuevo A-Yuan? -emocionado-

Jingyi: Vamos dilo -sonriendo-

Sizhui se sentía avergonzado por lo que había dicho ya que era la primera vez que llamaba así al mayor que lo había adoptado y lo había criado como su propio hijo, a él no le importaba las burlas que le hiciera mientras el mayor sea feliz eso lo dejaba más que satisfecho, así que respiro profundamente mirandolos

Sizhui: Mamá -mirando a Wei Ying-

Wei Ying: Aquí estoy mi pequeño A-Yuan -abrazandolo junto a Jingyi-

Los tres se la pasaron platicando sobre el embarazo de Wei Ying, pero que no dijeran nada ya que si Hanguang-jun quería formar una familia donde no estuviera el o su bebé lo dejaría en paz. El personalmente iba a pedirle a los ancianos que anularan su matrimonio y así lo hizo, al día siguiente llegó acompañado de los dos discípulos los cuales tenían un semblante serio al ver a Hanguang-jun tomar la mano de una mujer sin siquiera separarla, cuando esté los llamo estos lo ignoraron y continuaron siguiendo a Wei Ying.

Wei Ying: Saludo a los ancianos de la secta Lan-dijo haciendo una reverencia-

X: ¿A qué has venido? -dijo un anciano el cual ya sabía porque había ido esa persona ante ellos provocando una pequeña sonrisa-

Wei Ying: Quisiera anular mi matrimonio con Hanguang-jun al igual que quiero llevarme a mi hijo Sizhui y a Jingyi conmigo junto a unos conejos

Xichen: ¿Por qué?

Wei Ying: ¿Pregunta el por qué? -dijo con una sonrisa- la respuesta es fácil no quiero estar en esta secta corrupta que solo juzga a los demás, la cual rompe sus 4000 reglas a su antojo -molesta-

X: ¿Por qué dice que rompemos las reglas a nuestro antojo? -dijo Qiren confundido-

Wei Ying: En sus reglas está una la cual dice que no se meterán en los matrimonios y eso andan haciendo, otra en la cual dicen que no mentiras -mirando a Hanguang-jun- pero aún así lo hacen además de no juzgar a nadie por como es o como viste y eso es lo que ustedes han estado haciendo desde que me case hace 4 años -volteando a ver a los ancianos- No quiero estar en un lugar donde solo me critiquen a mi o a mis pequeños niños Sizhui y Jingyi ya que se muy bien que ustedes piensan usarlos como herramientas para tener relaciones con las demás sectas y eso no lo permitiré y menos que me traten como una amante ya que yo valgo más y no estare al lado de un hombre mentiroso que hizo tantas promesas que jamás cumplirás -apreto el puño ya que todo eso era verdad, quería llorar pero no podía darles el lujo a esos ancianos de verlo así- Vendré en unos meses por la carta de divorcio, por lo mientras no me dejen saber nada de ustedes

Lan Zhan: Wei Ying...

Hanguang-jun quería ir detrás de el, abrazarlo y explicarle todo pero se tuvo que aguantar ya que si era una decisión tomada por los ancianos de su secta este debía de cumplirlas al pie de la letra le gustará o no, además de que pudo notar que las miradas de los menores le reflejaban un a"Si lo tocas no nos culpes por ser crueles contigo" eso igual lo dejo desconcertado y confundido.

Al salir del salón Wei Ying se estiró pues solo faltaba regresar por su certificado de divorcio, camino hacia el Jingshi dónde antes había estado con Lan Wangji haciendo su "todos los días" dónde se había entregado más de una vez sin negar nada. Dónde por una vez se sintió amado, todos esos recuerdos invadian su mente quería llorar pero no era momento de hacer, debía ser fuerte por el y su pequeño que viene en camino. Así que tomo sus cosas junto con una jaula donde llevaba a tres conejitos negros y un conejo blanco recién nacido y sin más salió d ella secta seguido de dos menores que igual habían guardado sus cosas y estaban dispuestos a seguir al mayor donde sea que vayan...