Título de la parte

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Como un jinete sin caballo
como una abeja sin colmena
como una rosa sin espinas
no soy real, ni existo
Deambulo por la vida
como una estrella apagada
un zombie sin hambre
como un niño sin sonrisa
Vivo entre las sombras
intentado encontrar mi hogar
pensando que algún día
lo pueda encontrar...





Siempre me decía que había venido a este mundo, solo para sufrir, sabía que mamá me odiaba, no deseaba tenerme, pero... ¿para que me dio a luz, si solo quería regresarme a las sombras de la muerte?
Papá, papá no recuerdo, ni se quien es, mamá se niega a hablarme de él, tal vez nunca lo conozca, ya que mamá me dice que papá nunca volverá, murió o nos abandono, esas son las dos opciones y ella nunca me dirá cuál es la verdadera...


Un pequeño Levi de cuatro años, se encontraba sentado en la alfombra de la sala, sintiendo la mirada que su madre le daba, desde la mesa de la cocina, era un niño fuerte, por eso no lloraría, pero odiaba su madre nunca se acercaba a abrazarlo y mimarlo, no tenía muestras de cariño y afecto, parecía que su sola presencia le causaba repulsión.

Como buen niño siempre se lavaba sus dientes, se cambiaba su ropa y se acostaba a dormir, su madre se acercaba y quería darle un jugo "especial", pero el tenía miedo, cuando tomaba ese jugo, siempre se levantaba cansado y con el cuerpo adolorido, sin saber la razón.

Pero eso no era nada comprado a lo que sufriría con el paso de los años.

En preescolar todo fue de mal en peor, sentía que los niños me miraban de forma extraña, nadie quería estar a mi lado y siempre me empujaban y golpeaban, yo nunca les había hecho daño, pero ellos eran crueles conmigo.

Levi esperaba sentado en la silla, esperando a que su madre saliera de la oficina del director.

Otra pelea, pero claro, él era el único culpable de todo y su madre solo asentía, claro, lo odiaba y era obvio que pensara que él era el malo.

Ese día fui suspendido y mi madre me informó que tendría que asistir al doctor.

Odiaba visitar a esa doctora, ella me hacía daño, maltrataba mi cuerpo y me decía palabras que me hacían llorar, aún así, mi madre no dejó de llevarme con ella, odiaba ir al doctor y por más que le dije a mi madre todo lo que me hacía, ella nunca dejó de llevarme.
Pero lo peor vino cuando a partir de esa noche, me di cuenta de por que me despertaba con el cuerpo cansado y adolorido, mamá intentaba matarme.
Recuerdo despertarme y sentir los brazos de mi madre en mi cuello, mientras intentaba asfixiarme, ella me odiaba y quería asesinarme, pero no tenía a donde ir, necesitaba seguir soportando este infierno hasta que pudiera escapar.

Levi veía como su madre lloraba en la puerta de su habitación, con los brazos cruzados y mirada aterrada, tal vez se había retractado de acabar con la vida de su propio hijo.

Desde ese día, Levi tomaría distancia con su madre, no podría estar con ella sin sentir miedo, pero aún no era momento de dejarla.

La primaria fue una de las peores experiencias que tuve en mi vida, el rechazo social era algo que ningún niño debemos tener.

Tal vez podría parecer indiferente por la expresión en mi rostro, pero por dentro, mi alma estaba siendo consumida por la soledad, la falta de amor materno y la oscuridad del aislamiento.

Una chica de cabellos castaños y con lentes se acercaba a Levi, a su lado, se encontraba un chico rubio de gruesas cejas, parecía que su rostro del rubio reflejaba determinación, mientras la de la chica demostraba entusiasmo

Viviendo en las sombras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora