¿La locura del amor?

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Mi novia era tan perfecta, su cabellera pelirroja que caía como una cascada hasta su cintura, ojos color miel que te endulzaban el día mas amargo. Sus pecas formaban una galaxia de estrellas en su bello rostro. Siempre que veía en su dirección me sonreía , pero no era él único que suspiraba al ver ese gesto.

Su mejor amiga Vanessa también veía esas sonrisas y suspiraba. Ellas creían que no me daba cuenta, de sus miradas, sus sonrisas cómplices. Todos decían que estaba loco, que veía cualquier cosa, pero no era así. 

Cada vez era todo más claro. Estaba seguro que ellas tenían algo. Mi cabeza no dejaba de dar vueltas en ese tema, todos los días, todas las semanas, todos los meses era lo mismo. Hasta que un día simplemente explote, necesitaba deshacerme de ella y para ello tenía el plan perfecto.

Era un plan de 4 pasos. Paso 1, secuestrar a Vanessa. Paso 2, llevarla al sótano de mi casa, era el lugar más seguro, después de todo nadie baja excepto yo. Paso 3, sacarle información sobre ella y Kanae. Y paso 4, no dejar rastros. Ese último paso era el más importante, pero era el último por una razón. La pista más grande siempre será el cuerpo, sin cuerpo no hay crimen y sin crimen no hay condena. Y así fue como todo comenzó.

Un Viernes, Vanessa había salido a bailar con sus amigas, la noche perfecta para llevar mi plan acabo.

Gracias a las redes sociales sabía en qué club estaba, simplemente estuve toda la noche esperando su salida, sabía que iría caminando porque el lugar no quedaba muy lejos de su casa. Estaba todo fríamente calculado, a las 5 de la mañana fue cuando ella había salido.

La seguí con una campera obscura y mi capucha bien puesta para que no supiera quien era. Había dejado mi auto muy cerca del punto de acción, solo tenía que seguirla hasta llegar a el, cuando caminamos un par de cuadras ella se dio cuenta que mi presencia no desaparecía.

Podía sentir su corazón acelerarse, sus piernas cortas intentando dar pasos más largos y rápidos, ella prácticamente intentaba huir de manera disimulada. 

Pero no podés de tu destino, no me quitaría lo más importante para mi, si ella no existía más, nada se interpondrá entre mi amada y yo.

Por esa razón me coloqué rápidamente detrás de ella y con un pañuelo húmedo con cloroformo, la agarre por detrás del cuello y coloque el pañuelo en su boca, en pocos minutos sentí como su cuerpo dejaba de luchar y se hacía más pesado.

La primera fase del plan estaba completa, se que pensarán que estoy loco por todo esto, pero no, solo estoy enamorado. Estar enamorado te hace cometer locuras ¿No?.

Cargue su cuerpo hasta mi auto, maneje directo a mi casa, había preparado el sótano para esta ocasión; tenía todo fríamente calculado, no había errores en mi plan, no podían haber errores. Al llegar simplemente la ate en una silla que había preparado en mi sótano, una vez que sus piernas y brazos fueron inmovilizados solo tenia que esperar.

Sentado en una silla frente a ella espere pacientemente, ustedes no entienden lo satisfactorio que fue ver como sus brazos empezaron con movimientos débiles para liberarse y terminar con un movimiento desesperado de piernas, su respiración entre cortándose, sus gritos siendo amortiguados por una mordaza.

Presenciar todo eso era perfecto. Estaba tan cerca de saberlo todo, de que mis dudas fueran respondidas y que al fin mi mente pudiera descansar de su presencia, quien diría que no todos los planes salen como uno lo espera.

Cuando ella termino de despertarse fue que di inicio al paso 3 del plan.

Gritos era todo lo que se podía escuchar en ese sótano, eran música para mis oídos, ella fue realmente muy difícil de tratar, sin importar cuantas partes de su cuerpo cortara ni cuanta sangre perdiera, ella seguía diciendo la misma mentira "Yo no tengo nada con Kanae".Llego un punto en que dejo de mentir, dejo de hablar y dejo de gritar. Corte su lengua, eso no era parte del plan.

Mientras la veía retorcerse sentí que me llegaba un mensaje, el cual ignore.  Ella intento escupir la sangre que corría por su garganta, se estaba ahogando con ella, era la imagen mas esplendida del mundo.

Había quitado al estorbo de mi camino, mientras ella moría solo podía verla, soltando pequeñas risas y disfrutando de los sonidos que su cuerpo emitía. Hasta que de un momento a otro todo fue silencio o eso creí.

—¿¡QUE DEMONIOS!?—La escuche gritar

Detrás de mi, bajando las escaleras del sótano estaba Kanae, tenia una expresión de puro terror y se estaba mas blanca de lo normal. Su mirada iba entre mi y el cadáver, su cuerpo parecía no reaccionar a lo sucedido.

—Mi amor—Le sonreí—¿No estas feliz? Acabo de deshacerme de la única persona que se interponía entre nosotros-Decía mientras me acercaba a ella

El miedo en sus ojos me hizo echo frenar.

—Me temes

Su respiración se había cortado, en ese momento había notado sus intenciones, quería huir.

—Sabes—Suspire—Temía que esto pasara, temía que no entendieras—Agarre su mano antes de que se fuera—NO ENTENDISTE QUE ELLA ERA UN ESTORBO—Grite y golpee su cuerpo contra la pared agarrándola del cuello—Ella te iba a quitar de mi lado.

—ESTAS LOCO—Grito y intento soltarse de mi agarre—SUELTAME—Intento patearme

—NO ESTOY LOCO—Volví a gritar—Estoy enamorado y tu no lo entiendes—Mi agarre en su cuello empezó a apretarse mas, su cuerpo se movía con mas desesperación, el aire no le pasaba—¿Por que no entiendes? Esto lo hago por nosotros—Su cuerpo empezó a moverse con mas lentitud, hasta que dejo de respirar—Tenias que entenderlo—Una lagrima cayo por mi mejilla mientras abrazaba su cuerpo inerte—

Esas fueron mis ultimas palabras hacia ella.

—Yo la amaba tanto—Dije a el jurado—Ahora gracias a mi vivirá para siempre

—Entonces ¿Se declara culpable?—Me pregunto el juez

—CLARO QUE NO—Grite levantándome de mi asiento—YO LA AMABA, USTEDES SON COMO ELLA, NO ENTIENDEN NADA—Dije antes de agarrar el arma de un guardia—Ella debió entenderme, se lo explicare, esta vez lo entenderá—Coloque el arma en mi cien del lado izquierdo—Viviremos para siempre en los cielos—Susurre eso ultimo antes de apretar el gatillo

Mi vista se tiño de rojo, para terminar con todo negro a mi alrededor, me sentía flotar en un mar de frialdad y oscuridad.

—Así se siente la muerte-Una voz profunda y rasposa susurro—Y así se sintieron ellas

—No quería que Kanae sintiera esto—Susurre cerrando mis ojos

—¿Por que?—Pregunto la voz

—Porque la amaba—Respondí

—Tu no la amabas—La voz cada vez se hacia mas fuerte—Tenias una obsesión, una enferma obsesión que te llevo a matarla.

—NO—Grite y abrí mis ojos

Frente a mi se encontraba un hombre en un traje negro con detalles rojos.

—Si—Estiro su mano hasta tomarme del cuello de mi camisa—Y por esa razón, el infierno te espera—Sonrió antes de tirarme contra el suelo

Este empezó a rodearme, era como si una agua espesa de color negro me absorbiera. No podía gritar, no podía ni moverme. 

El amor es una energía que fluye atreves de nosotros, a veces la compartimos con alguien que creemos es la persona indicada. Le abrimos las puertas de nuestro corazón y mundo, pero no siempre las personas son lo que aparentan, cuando el "amor" te lleva a un punto de locura del cual no puedes volver. ¿Estas seguro que realmente estas enamorado?

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Consigna de este trabajo: Escribir un relato breve de lo que te inspire la lectura de EL CORAZÓN DELATOR de Edgar Allan Poe.

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⏰ Última actualización: Jul 17, 2021 ⏰

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