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MC: "...Como se lo dije ayer, Herr Mozart, no vine a esta mansión porque quisiera."
Mozart: "Y yo te digo que esta mansión tampoco te quiere aquí".
MC: "Me doy cuenta de eso pero no puedo volver, así que, qué más podrías ha--"
En medio de la frase, vi que la botella comenzó a volcarse de lado en la bandeja por el rabillo del ojo.
MC: "¡Ahh!"
Mozart: "...!"
Rápidamente intenté recuperar el equilibrio, pero fue en vano.
La botella se cayó de la bandeja, haciéndose añicos en el suelo justo entre nosotros con un estruendo.
Observé con horror cómo el líquido carmesí se extendía por el suelo de mármol blanco pulido.
(Oh, no... ¡Será mejor que me dé prisa y lo limpie!)
Empecé a arrodillarme, pero entonces noté algo muy extraño, que me detuvo en seco.
(Espera un segundo... Tenía razón. Esto no es vino tinto en absoluto).
Era más espeso, más viscoso que el vino... El color de la sangre profunda y oscura.
(Sangre... ¿Es realmente sangre?)
Mozart: "¿No me digas que aceptaste quedarte aquí sin saber la verdad?"
Mozart entrecerró los ojos al ver mi reacción.
Mozart: "Idiota e imprudente. Eso es lo que eres".
MC: "¿Más insultos? ¿De qué hablas ahora?"
Di un paso atrás, levantando la mirada del pegajoso charco del suelo.
Y entonces vi que él también tenía salpicaduras de color rojo oscuro en la mano.
Una sonrisa cruel se grabó en sus labios mientras levantaba lentamente la mano hacia su boca.
Mozart: "¿Debería decírtelo, pequeña y pobre oveja?"
Una extraña sensación me invadió cuando separó ligeramente los labios y vislumbré su lengua.
Observé cómo se lamía la sangre de la palma de la mano, un gesto en cierto modo primario y sexy.
Había un destello peligroso en sus ojos que me recordaba a un hermoso lobo salvaje atrapando a su presa.
Mozart: "Todos los hombres que viven en esta mansión... son vampiros".
(No... No, no puede ser verdad).
Me invadió un miedo incontrolable que pareció extenderse por todo mi cuerpo.
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Ikemen Vampire en ESPAÑOL 『Ruta Mozart』
Hayran Kurgu"¿Y por qué, exactamente, debería estrechar tu mano?" Un prodigio que comenzó a componer desde los cinco años, Mozart vive y respira música. Llegó a la mansión con el objetivo de componer su mejor pieza hasta el momento. Es distante y abrasivo, sin...