LONELY HEART ── Once upon a time

🏡 ▍❛ PROLOGUE ❜

▬▬▬▬ prólogo , volver a casa
❝Feliz cumpleaños, Eve's❞

         EVELYN MILLS MIRABA indecisa el cartel que anunciaba la entrada al aburrido pueblo del que era originaria, StoryBrooke. Hace casi tres años que había abandonado la ciudad con la excusa de querer estudiar en el exterior. No quería, pero sabía que era tiempo de volver a casa ahora que ya había terminado su carrera.

Evie avanzaba lentamente queriendo retrasar lo más que pudiera el convivir con los habitantes de la cuidad, no era algo personal, pero no se sentía del todo cómoda en el lugar.

Siguió conduciendo mientras el cielo estrellado parecía brillar cada vez más, hasta llegar a la casa de la alcaldesa. Una vez hecho, con prisa se bajó del auto sin llevar su equipaje con ella y caminó hasta la entrada principal.

La mujer estaba por abrir la puerta cuando su hermana, Regina lo hizo primero desde adentro, mirándola sorprendida, antes de dejarla pasar.

—Que bueno que estés aquí. —sonrió, mientras le daba un abrazo algo largo. —Feliz cumpleaños, cariño.

—Gracias Gina, me alegra estar aquí también, —mintió descaradamente la menor. —¿Vine en un mal momento? Luces nerviosa, si tienes una cita puedo quedarme con Adelaide.

Adelaide, su mejor amiga, era una mujer peli negra y tremendamente hermosa que podía llegar a atemorizar a las personas, detective privada con gran fascinación por las armas de fuego y las margaritas.

Regina suspiró mientras se sentaba en el sillón junto a ella. —Ojalá fuera eso... Es Henry, yo llegué tarde hoy y él no estaba en casa, lo busqué por todas partes y cuando no lo encontré me preocupé aún más, así que llamé a Graham y ahora estoy esperando a que vuelva, está buscando por la ciudad.

Ante la mención del comisario, el corazón de Evie se encogió un poco. Una pequeña parte de ella aún seguía extrañándolo después de tanto tiempo y todo lo que había pasado entre ellos.

Y aunque quisiera, ella no se odiaba a si misma por seguir queriéndolo, no podía culparse. El hombre alto, apuesto y comprensivo había sido su primer y único amor hasta el momento, con quién vivió experiencias memorables que nunca podría borrar y si era sincera, tampoco quería que se fueran.

Evie salió de sus pensamientos y dejó de concentrarse en estos, pues no era el momento ni el lugar. Por lo que seguidamente trató de reconfortar a su hermana al abrazarla como hace mucho no lo hacía, transmitiendo todo su amor y apoyo, pues aquel niño soñador y tierno era lo más importante en la vida de la mujer y Evelyn lo sabía perfectamente.

—Seguro está bien, sabes como es Henry, volverá... Iré a prepararte un té.

El tiempo pasaba lentamente mientras la angustia y la incertidumbre crecía en las hermanas. El cumpleaños de Evelyn se acercaba cada vez más a su fin, y eso solo preocupaba más a Regina y a la misma Evie que trataba de parecer tranquila para evitar poner más nerviosa a la mayor.